Sobre su situación de prisión provisional investigado por rebelión y sedición, ha afirmado: "La prisión es dura. Y estar en prisión sin haber sido condenado, cuando soy un diputado electo que siempre se ha expresado democrática y pacíficamente, es sorprendente y algo que no sucedería en el Reino Unido ".
Además, ha argumentado que "si la actitud del Estado es de castigo y venganza, entonces la prisión podría durar mucho tiempo".
"Hay un fiscal General del Estado escogido por el gobierno del PP que exige cárcel. Y los jueces lo otorgan. Esos son los hechos objetivos", ha valorado.
Ha puntualizado que "lo importante no es el destino del individuo sino el de la colectividad. La historia muestra que los avances democráticos a menudo han sido precedidos por la prisión y la represión. La libertad no se ha entregado, siempre ha tenido un precio".
Para Junqueras, los objetivos de los políticos deben ser mejorar las vidas de las personas y hacer un estado más justo y más libre al servicio de los ciudadanos, y ha lamentado que "la mayoría de las personas no sienten que el Estado les está sirviendo".
Junqueras ha defendido que la fuerza de un movimiento popular, democrático y no violento reside sobre todo en su capacidad de ampliarse y que es la suma de muchos actores y sectores sociales, entre ellos los líderes de los partidos: "Esa es nuestra fortaleza".