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El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha recibido este martes en el Palacio de la Moncloa al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, con el objetivo de normalizar las relaciones tras una dura campaña en la que los 'naranjas' establecieron un veto al PSOE de cara a los pactos poselectorales. Por la tarde será el turno del líder de Podemos, Pablo Iglesias.
Sánchez recibe a Rivera un día después que al presidente del PP, Pablo Casado, en un intento de dar un trato singular a Casado para remarcar así su papel como principal líder de la oposición, pese a la corta distancia (de tan sólo 9 escaños en el Congreso) que le separa de Ciudadanos tras los resultados del 28 de abril.
Al igual que con Casado el lunes, Sánchez ha salido a recibir a Rivera a la escalinata del Palacio de la Moncloa, aunque no ha llegado a bajar ningún peldaño, en cuanto el vehículo que conducía a Rivera llegó a las puertas del Palacio.
"Hola, Albert", le ha saludado Sánchez, estrechándole la mano. Ambos han posado unos instantes ante las cámaras, dándose la mano, mientras se preguntaban con cortesía qué tal les iba todo.
A continuación, Sánchez ha conducido a Rivera a la sala Tapies, donde el presidente recibe siempre a sus visitas y ambos han estado charlando amigablemente mientras la prensa gráfica tomaba imágenes y grababa.
Al término del encuentro, Rivera ofrecerá una rueda de prensa. En principio, hablará en la sala briefing, más pequeña que la que usó el lunes Casado, que compareció en la misma sala desde la que el Gobierno informa sobre los Consejos de Ministros.
Desde Podemos, su secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha señalado que acudirá a su reunión con Sánchez en La Moncloa para proponer un gobierno de coalición proporcional a los escaños que tiene cada uno, aunque sabiendo que "todos" deben ceder, escuchar y empatizar para "construir una nueva etapa de entendimiento". Ha subrayado que no habrá "líneas rojas, ultimátums o arrogancias" sino "claridad".
En su intervención inicial en el Consejo Ciudadano Estatal, máximo órgano de decisión entre asambleas, Iglesias ha reconocido que la iniciativa la tiene el PSOE, pero ellos le trasladarán al presidente su disposición "al diálogo para participar en la formación de un gobierno con una base parlamentaria amplia que sea estable y garantice la aplicación de un programa progresista".
Además, ha aclarado que su intención es participar de ese Ejecutivo progresista de forma proporcional a los escaños obtenidos y ha matizado que la palabra final sobre si la formación morada va a una coalición o si apoya la investidura la tendrán los inscritos en la Asamblea Ciudadana.
No obstante, el secretario general de Podemos ha señalado ante los miembros del CCE (entre los que están los responsables autonómicos del partido y diputados electos) que el mandato que salió de las urnas el 28 de abril es el de que el conjunto de fuerzas progresistas y las fuerzas democristianas logren los acuerdos necesarios para que "España afronte sus desafíos de país".
Esos desafíos para Iglesias son lograr una mayor justicia social, desarrollar un modelo de país que no se base en salarios bajos y en precariedad, y abordar la plurinacionalidad. "El primer actor político interpelado es el PSOE, ganador de las elecciones, que ha recibido un mandato claro: frenar al trío de Colón", ha añadido, para apuntar que muchos ciudadanos le han dado su apoyo por ese motivo.
Iglesias ha felicitado una vez más a Sánchez por el resultado electoral aunque ha recordado que es el tercer peor dato del PSOE desde las elecciones de 1977. "El resultado es muy importante, deben tomar la iniciativa y liderar el Gobierno", ha añadido, para acto seguido advertir a Sánchez de que "no podrá caminar solos como en otras épocas".
El líder morado ha señalado entonces que 'las tres derechas' (por PP, Ciudadanos y Vox) han obtenido el 43,2% de los votos, "un peso enorme", y que suman 149 escaños frente a los 123 del PSOE. Tras esto, ha recordado que Unidas Podemos se ha alzado con 42 escaños, lo que sitúa a los progresistas en el 43%, "a la par que el bloque de derechas".
En ese punto Iglesias ha recordado los buenos resultados obtenidos por nacionalistas e independentistas (PNV, ERC, EH Bildu) y ha añadido que todo esto arroja que España es plurinacional y "muy diversa en lo ideológico, en la relación rural y urbano, y en la relación centro-periferia". Ha recordado también los votos de PACMA y de otros partidos regionalistas.
Sobre el papel desempeñado por la formación durante la carrera hacia las urnas, el líder ha apuntado que han realizado su "mejor campaña electoral" y han demostrado "mucha solvencia en los debates". "Ha servido para derrotar a los sondeos que auguraban una debacle que no se ha producido", ha señalado, para incidir en que salen con la fuerza suficiente como para cumplir con el objetivo de participar en la construcción de un Gobierno "parlamentariamente estable y de izquierdas".
Con todo, Iglesias ha señalado que ahora toca cierta "provisionalidad" a la espera de lo que deparen los comicios municipales y autonómicos del 26 de mayo, y ha resaltado que tanto desde la banca internacional como desde la prensa financiera ya han hecho pública su preferencia de un pacto de PSOE con Ciudadanos. Así, ha apuntado que es de esperar que "el brazo económico haga su trabajo", y ha añadido que esta preocupación del sector financiero revela las posibilidad de cambio desde un Gobierno, "incluso desde una posición minoritaria".
"A lo mejor desde una posición modesta en el Gobierno hay cosas que se pueden cambiar y que tienen que ver con la justicia fiscal, con las pensiones, con el mercado de trabajo o con ponerle límites al oligopolio eléctrico", ha señalado entre otros.
No obstante, ha recordado a los asistentes que el PSOE ha manifestado en público su deseo de Gobernar en solitario, y ha apuntado que esto puede deberse a que sectores del 'socialismo' prefieran pactar "con la derecha cuestiones económicas y con la izquierda cosas simbólicas".
Iglesias ha matizado entonces que otros sectores del PSOE "no ven con malos ojos" un Ejecutivo que incluya a los morados "en la proporción que dan los votos, y que es un gobierno claramente liderado por el PSOE". "Les preocupa las dificultades de hacer algo que es habitual en Europa y en comunidades como Valencia (...), pero que no se ha hecho a nivel estatal", ha indicado, para luego recalcar que en Podemos deben demostrar "madurez, tranquilidad, firmeza en las convicciones y capacidad de diálogo y negociación".
"Es nuestra obligación convencer al PSOE de que la estabilidad es buena para España. Solo un gobierno de coalición asegura un programa de izquierdas, basta con escuchar a los poderes económicos", ha dicho. Tras esto, ha calificado de "vergonzoso" que mientras la derecha alcanza acuerdos para gobiernos de coalición, fuerzas progresistas que comparten puntos de sus programas siguen teniendo "recelos y desconfianzas".