Estas son algunas de las afirmaciones que se recogen en una entrevista que hoy publican los diarios del Grupo Vocento, recogida por Efe, donde el primer lehendakari socialista también indica que en su primer Consejo del próximo martes va a anunciar la puesta en marcha del diálogo social con empresarios y centrales para hacer frente a la crisis.
"No vamos a utilizar la frustración como un logro para reafirmar la posición del Gobierno vasco o de Euskadi frente a España porque nuestra historia ha estado plagada de entendimientos que han sido fundamentales", insiste López, quien matiza sin embargo que eso no quiere decir que "vaya a renunciar a ninguna de las medidas que necesita" el País Vasco, "como transferencias, competencias".
También asegura que no va a gobernar para los socialistas vascos y reconoce que puede que haya momentos "en los que se produzcan diferencias con el PSE".
Respecto al PNV, se muestra seguro de que "se le pasará esta mala digestión de los resultados electorales" y que "va a renacer" ese partido nacionalista "responsable" que "le llevará a alcanzar acuerdos en beneficio de la sociedad vasca".
López reconoce que la situación económica "es muy mala" y hace un llamamiento a los sindicatos nacionalistas ELA y LAB para que desconvoquen la huelga general anunciada para el próximo 21 de mayo y se sumen a la mesa de diálogo.
Respecto a las medidas para hacer frente a la crisis, López dice que va a utilizar "todos los instrumentos, incluido el endeudamiento", pero matiza que van a "ser rigurosos".
También indica que van a reclamar la transferencia de las políticas activas de empleo y que "una de las primeras cosas que vamos a hacer es ayudar a las familias que tienen a todos sus miembros en paro".
López opina que el concierto económico y el tejido industrial vasco servirán para "enfrentarnos mejor que otros a la crisis", y dice que nunca se han negado a la fusión de las tres cajas vascas, algo que "es necesario" y que intentará se haga pronto.
Finalmente dice que su objetivo es acabar la legislatura dominando el euskera para hacer un debate.