La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha afirmado que la dirección decidirá el martes si va a la celebración institucional que el Gobierno y el Parlamento catalán harán al día siguiente por la Diada, jornada en que el partido organizará por primera vez un acto propio, en la Plaza del Rey de Barcelona.
Al preguntársele en rueda de prensa si también acudirán al acto en defensa de la unidad de España que convoca el Movimiento 12-O, ha dicho: "No queremos que haya ni cadenas ni contramanifestaciones".
"El PP estará en su acto de unidad y de concordia, adonde invitamos a los partidos y a toda la sociedad a demostrar que queremos una Diada de todos", ha agregado la dirigente popular.
El acto, cuyo horario aún debe determinarse, pretende celebrar la Diada apelando a la unidad de la sociedad civil catalana, algo que "se ha perdido" en los actos institucionales que hará el Govern y en el Parlament.
Para ella, pervierten el componente cívico e institucional de la Diada tanto el presidente de la Generalitat, Artur Mas, como la del Parlament, Núria de Gispert, tras anunciar que en la Diada recibirán a la Assemblea Nacional Catalana (ANC), organizadora de la 'Via Catalana'.
Ha hecho además un llamamiento a los partidos que no defienden la secesión a sumarse al acto que hará el PP, y se ha dirigido a UDC, PSC, ICV y C's para destacar que suman más escaños en el Parlament que CDC, ERC y CUP, los que dan "apoyo directo" junto al Govern a la cadena humana.
CREE QUE EL GOVERN ES PARCIAL
Camacho ha cargado contra la Conselleria de Interior y ha leído un texto de los Mossos d'Esquadra titulado 'Recomendaciones de seguridad para los participantes del acto Via Catalana del 11 de septiembre', que llama a sus participantes a seguir "de forma rápida y atenta" las instrucciones de la ANC.
La popular ha asegurado que este escrito demuestra que el Govern no está siendo imparcial ante una convocatoria cívica, y ha asegurado que la cadena será la movilización "más cara de la historia" de Cataluña, porque la Generalitat asumirá el coste de los peajes de las autopistas para evitar colapsos.