Eva Ortiz y Auxiliadora Correa (PP), Sergio Gutiérrez (PSOE) y Salvador Sedó (CiU) deberán esperar a que el Parlamento Europeo aumente su tamaño para ocupar un asiento en la Eurocámara.
Las elecciones europeas se han celebrado hoy bajo el Tratado de Niza, que fijó un Parlamento de 736 escaños y otorgó 50 a España (cuatro menos que en la última legislatura).
Pero el Tratado de Lisboa prevé que la cámara tenga 751 eurodiputados y su aplicación supondría cuatro representantes más para España.
Todo está en manos ahora de los votantes irlandeses, que tendrán un nuevo referéndum sobre el Tratado después de haber rechazado el texto por mayoría en junio del año pasado.
Entre otras cosas, de su "sí" depende que Lisboa se aplique, que el Parlamento aumente su tamaño y que haya cuatro eurodiputados españoles más en Estrasburgo.
En total son 18 los escaños que están en el aire, pero España, con cuatro, es el país europeo más afectado; Francia, Suecia y Austria tienen dos eurodiputados cada uno pendientes del Tratado de Lisboa y hasta ocho países conseguirán un asiento más cuando entre en vigor.
Cincuenta es la cifra más baja de eurodiputados españoles desde que España tiene representación en Estrasburgo.
En las primeras elecciones, celebradas el 10 de junio de 1987, se eligió a los ocupantes de 60 escaños, representación que se mantuvo en los comicios de 1989.
Ya con el Tratado de Maastricht en vigor, en junio de 1994, los españoles designaron a 64 europarlamentarios y mantuvieron esa cuota en las elecciones de 1999.
Fue en 2004 cuando se aplicó el Tratado de Niza y España vio reducida su presentación a 54 escaños, con la advertencia además de que el ingreso de Rumanía y Bulgaria en la UE rebajaría esa cifra a 50.