PSOE vuelve a pedir la retirada de la reforma local y el PP le emplaza de nuevo a negociar en el Congreso

EUROPA PRESS 26/06/2013 15:01

El socialista Gaspar Zarrías ha defendido en el Pleno del Congreso una moción para que el Ejecutivo retire lo que por el momento es un borrador, pendiente de informe del Consejo de Estado, porque no cumple ninguno de los objetivos pretendidos por el Gobierno

Zarrías ha negado que se vaya a lograr aplicar el principio de una administración, una competencia, porque se incluye un sistema "confuso" y "enrevesado". Ha calificado además de "bulldozer" el "famoso coste estándar", el valor que deben tener de media los servicios públicos municipales y cuyo incumplimiento quitará competencias a los ayuntamientos.

El diputado no se ha ahorrado calificativos y ha asegurado que se trata de "una vulneración" de la Constitución, un "monumento a la arbitrariedad", un "bodrio" que es además "impreciso, parcialmente incoherente e inadecuado para lo que pretende".

El resultado será, como el mismo Zarrías ha repetido en múltiples ocasiones, la privatización de muchos servicios, cuyo coste ascenderá y cuya calidad, a juicio del PSOE, descenderá.

El portavoz socialista ha añadido que su partido quiere negociar el informe de reforma de las administraciones públicas y que en este contexto se puede iniciar otra vez la reforma local. "El PSOE no va a ser cómplice del desaguisado que van a producir en los ayuntamientos", ha dicho.

QUEDA TIEMPO

Por el PP, Ricardo Tarno ha expuesto los argumentos que su grupo también viene esgrimiendo desde hace meses en defensa de esta reforma y ha dicho que el diálogo con el PSOE comenzó hace un año y ha durado hasta que los socialistas "decidieron que era más rentable electoralmente" oponerse.

Ha negado una vez más que el objetivo de la norma sea privatizar servicios y ha subrayado que muchos alcaldes socialistas tienen "privatizados" servicios como mantenimiento de jardines o limpieza de colegios. "Ustedes hablan de educación pública y llevan sus hijos a colegios privados, tienen un lío", ha dicho en respuesta a las críticas del PSOE.

Tarno ha ofrecido de nuevo diálogo en el trámite parlamentario y le ha pedido al PSOE una actitud abierta, "no pongan chinas".

TODOS EN CONTRA

La reforma local ha situado de nuevo al resto de los grupos frente al Gobierno. Al PNV, entre otras cosas, porque no respeta la autonomía foral vasca, sobre la que ha introducido una enmienda en la moción del PSOE. Pedro Azpiazu ha rechazado ha puesto en duda, como Zarrías, el trabajo del Instituto de Estudios Económicos en el que se basa el cálculo del coste estándar que se quiere imponer, trabajo desconocido igualmente para el PNV, ha dicho.

"Y además, el consenso político cuando se va a adoptar una medida de este calado no solo es necesario, sino imprescindible", ha argumentado además el portavoz nacionalista. El PNV ha exigido por último el respeto a la foralidad en el texto de la reforma, "si algo de esto llega a aprobarse".

Carles Páramo (CiU) ha apoyado la propuesta del PSOE; ha criticado "falta de criterio" en la elaboración de esta reforma y el "rechazo unánime" que ha suscitado también en los expertos en administración local. Ha defendido el "buen hacer municipalista" y aunque ha comprendido que algunas medidas hay que tomar con, por ejemplo, los municipios en quiebra, no se debe "trastocar" lo que en conjunto "funciona".

El diputado ha pedido también que se atiendan las recomendaciones europeas sobre administración local, por ejemplo, en lo relativo a asegurar su correcta financiación y a fomentar que los municipios controlen mejor su propio gasto.

UPyD ha anunciado que opta por la abstención en la moción socialista por "dos problemas": es una moción "demasiado general" y que parece que "deja todo como está", y aunque ha apostado por eliminar las diputaciones, también ha defendido que se fomente la fusión de ayuntamientos teniendo en cuenta además la viabilidad de los municipios.

"A este Gobierno no se le ocurre idea buena", ha dicho Chesús Yuste, de la Chunta Aragonesista, que ha considerado "simplemente mentira" el "mantra" de una competencia, una administración. "¿Por qué no se suprimen entonces algunos ministerios?", ha preguntado.

Desde otros partidos como BNG y ERC también han rechazado la reforma local y han exigido especialmente la eliminación de las diputaciones.