Representantes de las herriko tabernas dicen que no aceptan la sentencia del Supremo porque es "un robo"

EUROPA PRESS 20/06/2015 13:34

En rueda de prensa celebrada en Zarautz, el representante de las herriko tabernas Koldobike Muniain ha manifestado que el fallo es "un eslabón más en la cadena de imposiciones de un Estado español que jamás ha roto con su pasado fascista".

"Las herriko tabernas son símbolo y ejemplo de esfuerzo y autoorganización popular. El esfuerzo, el trabajo y la aportación económica de miles de personas ha permitido que, durante décadas, decenas de pueblos y barrios de Euskal Herria hayan contado con espacios abiertos para actividades culturales, el debate y la actividad política. Eso es lo que el Estado quiere hacer desaparecer mediante el comiso o mejor dicho, el robo", ha alertado.

En esta línea, ha remarcado que no aceptan la sentencia y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía vasca a que se sume a esta defensa con movilizaciones los días 27 y 28.

Por su parte, el representante del movimiento Eleak Txerra Bolinaga ha considerado que "trabajar en favor de los derechos civiles y políticos es el modo más efectivo de responder a los ataques".

"El Tribunal Supremo español ha confirmado la incautación de 107 herrikos y la condena a 20 militantes de la izquierda abertzale, a pesar de rebajar la pena a algunos de ellos. Eleak y los grupos de trabajo Libre queremos denunciar este ataque contra los derechos civiles y políticos y mostrar nuestro apoyo y solidaridad a las persona condenadas", ha indicado.

A su juicio, el decomiso de 107 locales es un golpe "directo" a la sociedad vasca que "vulnera los derechos civiles y políticos de todas". "Si el objetivo es detener las innumerables muestras de compromiso popular acumulado por las herriko tabernas durante largos años nosotras responderemos con más compromiso, defenderemos nuestros txokos, así como hemos defendido a las personas imputadas. Frente a los ataques, seguiremos aunando compromisos y defendiendo los derechos de todos", ha añadido.

Asimismo, ha reconocido que están "cansados" de los "continuos ataques a los derechos humanos básicos y de esta caza sinsentido", así como de quienes "insisten en hacer oídos sordos mientras este pueblo da pasos".

"Este pueblo ha dejado bien claro que, unido, no hay gobierno, policía, juez o cansancio que lo detenga. Entre todos, hemos iniciado un camino que no tiene vuelta atrás", ha advertido.

Por último, ha incidido en que, si les obligan a elegir entre legalidad y justicia, se colocarán "al lado de la justicia", por lo que trabajarán en favor de acabar con las "vulneraciones de derechos".