La agente señalada por avisar a Pamies dice que conoció la reunión de la sidrería "a posteriori"

EUROPA PRESS 18/09/2013 11:07

La agente de la Brigada de San Sebastián señalada por las acusaciones como la persona que avisó al exjefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamies, de la puesta en marcha de una operación contra el aparato de extorsión de ETA ha asegurado que conoció la reunión de la sidrería en la que se acordó un pago del impuesto revolucionario después de que se produjera el chivatazo.

"En el momento en que se produce no (conocí la reunión), para nada. La he conocido con el paso del tiempo, a posteriori", ha señalado María Teresa H. en el arranque de la tercera sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Nacional por la filtración policial que se produjo el 4 de mayo de 2006 en el bar 'Faisán' de Irún (Guipúzcoa).

La testigo, que ha comparecido ante el tribunal luciendo una aparatosa peluca rubia y unas gafas de pasta, ha asegurado no recordar el contenido de las llamadas y los mensajes de texto que intercambió con Pamies en la noche anterior al soplo y durante el día en el que se frustró la operación policial contra ETA.

"Llevaba varios grupos y tenía varias operaciones pendientes con él de 'kale borroka', terrorismo islámico y MLNV", ha apuntado. "¿No puede precisar si habló de alguna de ellas en concreto?", le ha preguntado el fiscal, Carlos Bautista. "No", ha contestado.

"NO ESTABA EN LA REUNIÓN"

La agente, que actualmente es la jefa de la Brigada de Información de San Sebastián, ha negado que participara en la reunión con jefe de la Brigada de Información Provincial de San Sebastián, Manuel Risco, y el de la Sección Operativa, Antonio Longarón, en la que se analizó la transcripción del encuentro de la sidrería de Oiartzun (Guipúzcoa).

A esta reunión, que se celebró el 3 de mayo de 2006, asistieron el dueño del 'Faisán', Joseba Elosua, el entonces dirigente del PNV Gorka Aguirre y el presunto etarra Ramón Sagarzazu. En ella se comentó que el presunto recaudador de ETA, José Antonio Cau Aldanur, se pasaría por el establecimiento al día siguiente para recoger un pago del denominado 'impuesto revolucionario'.

"¿Recuerda haber estado en el despacho de Risco junto a Longarón examinando hojas manuscritas del contenido de la baliza?", le ha preguntado el fiscal. "Yo no estaba en esa reunión examinando nada", ha dicho la testigo. "¿Está convencida de ello?", ha insistido Bautista. "Sí".

El abogado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Antonio Guerrero, le ha preguntado por qué los días 3 y 4 de mayo intercambió 15 llamadas con Pamies y en los siguientes 82 días sólo 33. "Yo hablo con él desde mi teléfono móvil, desde los teléfonos fijos de la comisaría, desde casa... Depende... No veo extraño que esos días hablase mucho con él", ha explicado.

RESPALDA LA VERSIÓN DEL CONFIDENTE

A preguntas de la abogada de Pamies, María Ponte, María Teresa H. ha respaldado la versión del confidente esgrimida por el exjefe superior de Policía del País Vasco, actualmente destinado en la provincia de Huesca. "Sé que el comisario tiene varios confidentes. De 'Romano' sí he tenido conocimiento", ha dicho.

En este mismo sentido, ha declarado que cuando apoyó a Pamies para visitar a otros confidentes primero se acercaba a la zona de la reunión "para no tener problemas y luego ya iba él", tal y como, según las tesis de las defensas, hizo el inspector José María Ballesteros en el bar 'Faisán'.

Pamies y Ballesteros se enfrentan a hasta diez y nueve años de cárcel, respectivamente. La Fiscalía solicita para ellos dos y un año y medio de cárcel por revelación de secretos aunque el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, obligó a sus subordinados a incluir como alternativa una petición de cinco años por colaboración con organización terrorista.