El primer acto comenzó de manera inmejorable para el cuadro español, ya que en el primer minuto, el colegiado británico Andre Marriner decretaba un inexistente penalti después de que Salvio aprovechara un pase de Thiago en profundidad para encarar al meta luso e irse al suelo cuando intentaba driblarle. El Atlético había necesitado poco más de un minuto para dejar la eliminatoria prácticamente sentenciada, obligando a los lusos a conseguir cuatro goles para lograr la clasificación, algo que se antojaba prácticamente como un milagro. Joao Alves pudo lograr el empate en el 9 pero fue un espejismo de un Vitoria que estaba muy tocado tras este mazazo inicial.
Los de Manuel Machado querían reaccionar más por orgullo que por fútbol, pero se vieron martirizados por los rojiblancos, que con la velocidad de unos sobresalientes Salvio y Adrián, desarbolaban a la adelantada zaga local, inoperante a la hora de intentar dejar en fuera de juego a los puntas atléticos. En el 17, el 'Toto' aprovechaba los numerosos espacios que dejaba en defensa el cuadro portugués para habilitar a un Adrián que superaba con sangre fría a Nilson para marcar a puerta vacía.
El 0-2 noqueaba al débil conjunto de Guimaraes y convertía el resto del primer periodo, en un ejercicio de impotencia local y en un festival de ocasiones 'colchoneras'. El Atlético llegaba al descanso después de que Gabi culminara con tiro al palo la enésima contra de los suyos, de que cinco minutos después Salvio desperdiciara un nuevo mano a mano con Nilson y de que Mario Suárez en el descuento se topara por dos veces con el meta luso cuando ya se cantaba el tercero.
Recreo atlético La gran templanza de Gabi desde los once metros haría el resto para poner el 0-1.
La segunda mitad, que nacía ya con escaso interés tras la excelsa exhibición del conjunto madrileño en los primeros 45 minutos, continuó por los mismos derroteros que la primera. El Atlético era dueño y señor de la situación y se dedicaba a disfrutar de un choque en el que prácticamente no tenía rival, así como de la tranquilidad de haber cerrado el pase con placidez, tras lo sufrido del cruce anterior frente a los noruegos del Stromsgodset.
A pesar de ello los de Manzano no renunciaban a aspirar una victoria más amplia, claramente merecida por lo visto sobre el césped portugués. Los arietes atléticos siguieron siendo la pesadilla de la defensa local, tan adelantada como lenta. Tras una clara ocasión en el área pequeña de un renacido Elías, a al hora de partido, Adrián volvía a reivindicarse como un delantero del garantías para el equipo del Manzanares haciendo el 0-3.
El asturiano aprovechaba un rechace del meta luso tras cabezazo de Reyes para hacer el tercero de los suyos y abrir aún más la brecha con un Vitoria que deambulaba por el verde. Este tanto no colmó la voracidad de los rojiblancos, sin compasión por los portugueses, que llevaban todo el segundo acto agitando la bandera blanca. Elías y Adrián volvían a rondar el gol merced a dos mano a mano con Nilson.
La fiesta 'colchonera' no cesaba y encontraba el broche de oro con el tanto de un futbolista que quiere demostrar que es válido para a este equipo tras varios intentos fallidos de hacerse un hueco en la plantilla madrileña.
Salvio encontraba el premio a su notable actuación rematando un milimétrico centro de Koke para cerrar un choque en el que los de Gregorio Manzano pusieron las cartas sobre la mesa y a la espera de que se incorporen Arda Turan y el goleador colombiano Falcao, espantaron las dudas arrastradas durante la pretemporada y presentaron sus credenciales de cara a este fin de semana, en el que arrancará el campeonato liguero para el nuevo proyecto Atlético 'pos-Agüero'. La exhibición visitante parecía no tener fin.
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