"Los desminadores fueron atacados cuando llevaban a cabo sus operaciones", ha dicho el portavoz del gobierno provincial, Omar Zuak, en declaraciones al diario local 'The Afghanistan Times'.
Por su parte, el Servicio de Acción contra las Minas de Naciones Unidas (UNMAS) ha condenado el ataque, que Zuak ha achacado a los talibán, si bien los insurgentes aún no se han pronunciado sobre el incidente.
"El Programa de Acción contra Minas de Afganistán (MAPA) no será disuadido de sus importantes tareas por este tipo de ataques, que violan los principios más básicos de la humanidad", ha indicado en su comunicado.
Helmand es la provincia más grande de Afganistán y la tercera más poblada. Los datos de las autoridades provinciales recogen que al menos 23 civiles murieron en 2015 a causa de la explosión de minas y artefactos no activados.