Ban reclamó a Asad en una conversación telefónica que permita la entrada en Siria de un equipo de expertos en ayuda humanitaria, debido a la "alta preocupación en la comunidad internacional acerca de la actual situación humanitaria en el país", según explicó a la prensa el portavoz de la ONU, Martin Nesirky.
"El secretario general ha pedido a Asad que garantice inmediatamente el acceso de Naciones Unidas al país para responder a las necesidades humanitarias de la población civil", indicó Nesirky, quien aseguró que el presidente sirio Asad mostró su voluntad de considerar esa petición, concretamente para la ciudad de Deraa, sitiada desde hace una semana.
En la conversación, el máximo responsable de la ONU pidió al líder sirio que lleve a cabo reformas inmediatas y decisivas y que se comprometa además a colaborar con el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
"Ha llegado el momento de que el Gobierno de Siria lleve a cabo reformas decisivas y audaces. Este es el momento de aplicar esas reformas", explicó Ban a Asad, según detalló su portavoz.
Además destacó que "Siria debe colaborar con la comisión del Consejo de Derechos Humanos" del organismo que debe investigar la violenta represión que las autoridades de Damasco han aplicado contra los manifestantes que piden reformas democráticas.
La pasada semana el Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó una resolución promovida por Estados Unidos que condenó la represión de las protestas en Siria y decidió el envío de una misión de investigación al país árabe.
Una vez más el secretario general reiteró su llamada "al cese inmediato de la violencia y de las detenciones masivas de manifestantes pacíficos en Siria" y pidió que se lleve a cabo "una investigación independiente de todas las muertes acontecidas durante las protestas, incluidas las de militares y miembros de las fuerzas de seguridad".