Música, imágenes, testimonios y discursos políticos se han cruzado en este acto, celebrado en el Kursaal donostiarra, donde el ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra, el ex ministro y ex presidente del Parlamento Europeo Enrique Barón, el diputado José María Benegas y Odón Elorza han llevado su memoria a las vivencias que compartieron con "un hombre íntegro, cariñoso, esforzado y excelente socialista", en palabras del alcalde de San Sebastián.
Ha sido la viuda de Casas, la europarlamentaria del PSOE Bárbara Duhrkop, quien ha cerrado este homenaje y ha agradecido todo el apoyo recibido desde que perdió a su marido, al que los Comandados Autónomos Anticapitalistas asesinaron el 23 de febrero de 1984 en el portal de su domicilio.
"Gracias a todos los compañeros de Euskadi que han hecho una red de protección y solidaridad ante el dolor durante estos 25 años", ha dicho Duhrkop.
Muchos de ellos llenaban la sala de cámara del Kursaal para acompañar a la viuda y sus cuatro hijos, Daniel, Cristina, Andreas y Richard, el mayor, que ha tocado dos piezas al piano en este homenaje, al que también ha asistido una representación de Guadix, la localidad granadina en la que Casas nació en 1943.
Tras la música, las imágenes; primero las familiares, las de la boda, las del senador con sus hijos y su familia, luego las de su actividad política y finalmente las posteriores al atentado, las de la protesta en la calle, y las palabras del entonces presidente del Gobierno, Felipe González, contra los "fanáticos que recuerdan los peores tiempos del nazismo".
Alfonso Guerra y José María Benegas salieron después al escenario para presentar el libro "Recuerdo de Enrique Casas", que el segundo ha escrito por deseo de Bárbara Duhrkop y que ha editado la Fundación Pablo Iglesias, que preside el que fue número dos del PSOE y del Gobierno.
Benegas ha hablado de la "rabia y la tensión" que ha vivido durante la preparación del libro, porque le ha traído a la memoria a todos sus compañeros asesinados por el terrorismo.
Guerra, que ha recurrido a versos de Miguel Hernández para despedir con voz entrecortada a un "compañero del alma", ha reivindicado "la civilización para este trozo de planeta donde fanáticos se enseñorean en nombre de la destrucción y la muerte".
Después, ha sido el turno de Iñaki Arriola, secretario general de los socialistas guipuzcoanos, y de Patxi López, el líder del PSE/EE que aspira a ganar las elecciones vascas y que ha asegurado que la voluntad de su partido por gobernar en Euskadi es hoy "más firme y más fuerte".
"Venimos dispuestos a hacer realidad este sueño, por Enrique y por todas las víctimas del terrorismo", ha afirmado.
También Bárbara Duhrkop ha hablado de sueños y ha advertido de que no se resistía a hacerlo, pese a su uso "muy manido".
"Tener sueños es lo que nos hace mirar hacia adelante, es tener ilusión y ganas de luchar para alcanzarlo. Y el sueño para las futuras generaciones en Euskadi es tengan que vivir con una sola ausencia, la de la violencia terrorista", ha subrayado.