El apoyo a un "Plan Marshall Verde" afgano cierra un G8 marcado por Irán

AGENCIA EFE 27/06/2009 15:26

Esta es la principal apuesta que las delegaciones participantes en la cumbre, entre ellas la afgana y la pakistaní, hacen para afrontar el fenómeno de inestabilidad en esa región asiática, tema que "a priori" iba a ser el protagonista del encuentro, pero que ha cedido finalmente terreno a la crisis de Irán.

De hecho, hasta el último día se han repetido las preguntas de los periodistas a los ministros de Exteriores sobre la crisis tras los comicios del pasado 12 de junio, después de que ayer el presidente de turno del G8, el ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, afirmara que su grupo no da por "cerrada la partida" de las elecciones presidenciales de Irán.

Las declaraciones del G8 sobre Irán, donde se han producido multitud de manifestaciones contra los resultados oficiales que dan como ganador a Mahmud Ahmadineyad, fueron en la línea de las mantenidas en los últimos días, pero Teherán las consideró hoy como una "injerencia".

Sea como fuere, el G8 de Exteriores pudo, al menos en sus últimas reuniones, dejar aparcado por un momento el tema de Irán y analizar la estabilización de Afganistán y sus países vecinos, sobre todo Pakistán, para lo que apuestan por ir a la raíz del problema: el desarrollo económico de su población y, sobre todo, la agricultura.

"Los participantes apuestan por una más amplia cooperación agrícola que permita el desarrollo rural, la seguridad alimentaria, el crecimiento del empleo, unos mayores niveles de ingresos, alternativas al cultivo de opiáceos, y, finalmente, menores tensiones en la región", reza la declaración conjunta final.

Sobre este asunto habló el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, al término de la última de las sesiones de trabajo del G8 de Exteriores, a la que España estaba invitada junto con otros 26 países y varias instituciones internacionales.

Según dijo Moratinos, en la cumbre se ha acogido "con mucha satisfacción e interés" la propuesta que defiende España sobre un "Plan Marshall Verde" para Afganistán, que apuesta por una agricultura que en el país asiático supone el 55 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB).

En este sentido, Frattini explicó hoy durante la rueda de prensa concluyente de la cumbre que los países participantes piensan llevar a cabo el "Plan Marshall Verde" para Afganistán en colaboración con la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

En el G8 de Exteriores se apostó además por mejorar las infraestructuras y lograr un acceso a los mercados "más eficiente" no sólo en Afganistán, sino también en Pakistán y en el resto de países de la región.

Pero otro de los temas cruciales para la estabilidad de la región que fue abordado hoy fue el de los próximos comicios presidenciales de Afganistán de agosto, según confirmó Moratinos, quien cree que existe una "necesidad de estabilización y de legitimación del próximo Gobierno" afgano.

Ya en la tarde del viernes los países del G8 reiteraron ante el ministro de Exteriores de Afganistán, Rangin Dadfar Spanta, su compromiso con la comisión independiente para las elecciones presidenciales afganas.

Frattini consideró hoy como una iniciativa "a defender con fuerza" el llamamiento hecho este sábado por el presidente afgano, Hamid Karzai, a "todos los grupos armados de la oposición", incluidos los talibanes, para que participen en los comicios.

El ministro italiano afirmó que hay que saber distinguir "en la galaxia talibán a los grupos tribales que son prisioneros de Al-Qaeda y del terrorismo y que pueden ser reconducidos hacia un cuadro de legalidad".

De la cumbre del G8 de Exteriores de Trieste sale además el compromiso de Afganistán y Pakistán de cooperar en materia judicial y en el refuerzo de los controles transfronterizos para combatir el narcotráfico y evitar los movimientos libres de los terroristas.

Por Miguel Cabanillas