Una araña cuyo veneno es letal estaba escondida en el disfraz de Harry Potter que llevaba un niño de siete años. Como consecuencia y tal y como informa Daily Mail, le mordió un dedo y el pequeño empezó a sentir un pinchazo muy agudo.
Tras enseñar la herida a sus padres, ellos advirtieron el peligro de la situación y envolvieron su mano en un vendaje de compresión, atraparon a la araña y llamaron a una ambulancia.
Náuseas, sudor excesivo y calambres musculares son algunos de los síntomas que se pueden experimentar tras ser mordido por una araña venenosa, por lo que es importante actuar con rapidez.
Una vez que llegaron al Bowral and District Hospital, el personal médico mostró su sorpresa frente a las excelentes medidas de auxilio que habían realizado los progenitores. “Hicieron un gran trabajo al colocar presión sobre el vendaje inmovilizador y tranquilizarlo. Cuando llegaron, el niño no tenía ningún signo de envenenamiento y creo que fue por los primeros auxilios”, declara el doctor Matthew Bragg a Daily Mail.
Además, añade cómo actuar en el caso de ser atacado por una araña negra: “La inmovilización por presión es fundamental. No corras, mantén el área quieta y llama a una ambulancia. Es lo mejor que puedes hacer y este caso lo ilustra”, explica el doctor Bragg.
Posteriormente, el personal sanitario procedió a administrarle al pequeño un antídoto antes de trasladarlo al Randwick Children’s Hospital. “Primero comenzaron a hincharse los dedos y luego toda la mano, pero la medicación funcionó y a los diez minutos ya estaba mucho mejor”, explicó su madre.
Finalmente, llevaron a la araña al Zoológico de Taronga para conseguir más antídoto y tenerlo de reserva para otras ocasiones.