El Ejecutivo comunitario "mantiene dudas" sobre la legalidad de una serie de subsidios concedidos a las empresas que gestionan el trazado y el parque de ocio en mayo de este año, meses después de iniciar la investigación. Los fondos inyectados por las autoridades alemanas trataron de "evitar la quiebra inmediata" de tales empresas, según Bruselas.
La legislación europea no permite conceder dos veces en un periodo de diez años ayudas para rescatar o reestructurar empresas en apuros, para evitar que el apoyo reiterado tenga efectos de distorsión en la competencia.
Bruselas estudia ahora si las empresas en cuestión ya estaban en apuros cuando recibieron una primera ayuda en 2008 y si los subsidios de este año fueron ofrecidos en línea con las condiciones de mercado.