Todo había comenzado a primera hora de la mañana de este viernes, cuando los hermanos Chérif y Said Kuachi se habían atrincherado en una imprenta en la localidad de Dammartin-en-Goële, a la que habían llegado en un coche que habían robado poco antes a punta de pistola.
En un primer momento, y en medio de informaciones confusas, se llegó a hablar de dos fallecidos en un tiroteo, pero este dato fue posteriormente desmentido por las autoridades. Asimismo, se ha estado hablando sobre la presencia de rehenes en el interior de la imprenta, pero el Ministerio del Interior ha dicho no poder confirmar este dato.
Después de varias horas de una tensa calma, con el edificio rodeado por las fuerzas de intervención tanto de la Policía como de la Gendarmería, poco antes de las 17:00 horas se han escuchado intensos disparos y algunas explosiones. Al parecer, los dos sospechosos han tratado de abandonar a tiros el lugar y se han enfrentado con las fuerzas de seguridad.
Por el momento no ha habido una confirmación oficial sobre cómo se han desarrollado los hechos. Según 'Libération', tres agentes han resultado heridos en el choque.
En cuanto al presunto rehén, según ha revelado 'La Figaro', había conseguido pasar desapercibido para los hermanos Kuachi y conseguido salir sano y salvo una vez abatidos los dos sospechosos. El diario le ha identificado como Lilian, de 27 años y grafista de profesión. Tras ocultarse cuando entraron los secuestradores, escribió a su padre: "Me he escondido en la primera planta. Creo que han matado a todo el mundo. Avisa a la Policía para que intervenga".
Secuestro en Vincennes
Poco después, los medios franceses han informado de que la Policía había conseguido establecer una relación entre Amedy Coulibal y los dos autores del atentado contra 'Charlie Hebdo': los tres formaban parte de la misma filial yihadista de Buttes-Chaumont y se habrían conocido en 2005.
Entretanto, a primera hora de este viernes se sabía que las autoridades habían conseguido identificar al autor del tiroteo en el que había muerto una agente de Policía Municipal en Montrouge, en el sur de París, este jueves.
En torno a las 13:30 horas se conocía la noticia de que un hombre fuertemente armado había entrado a tiros en un supermercado 'kosher' en el barrio de Vincennes, en el este de la capital. Inmediatamente, los medios identificaron al secuestrador como el hombre que había matado a la agente.
Mientras se desarrollaban estos hechos, y con el establecimiento rodeado por un fuerte efectivo de las fuerzas de seguridad, la Prefectura de Policía de París ha publicado un comunicado pidiendo colaboración ciudadana para encontrar a Amedy Coulibaly, un varón negro nacido el 22 de febrero de 1982, y a una mujer de nombre Hayat Boumeddiene, nacida el 26 de junio de 1988, en relación con el suceso de Montrouge y ha advertido de que podrían estar "armados y ser peligrosos".
Como en Dammartin-en-Goële, las horas siguientes han sido de gran tensión y sin noticias sobre lo que estaba ocurriendo en el interior, donde se sabía que había varios rehenes pero no un número preciso. Todo se ha precipitado poco después de que comenzaran los disparos en el otro foco de atención.
En este caso, han sido las fuerzas de intervención de la Policía y la Gendarmería las que han dado el asalto durante el que Coulibaly ha fallecido.
Asimismo, según una el presidente de la República, Françoise Hollande, cuatro rehenes han muerto, si bien no está claro aún si ha sido por los disparos por las fuerzas de seguridad o si han sido abatidas previamente por el secuestrador. Asimismo, habría otros cuatro rehenes heridos de gravedad y cuya vida correría peligro.
Las fuerzas de seguridad han conseguido rescatar a un número indeterminado de rehenes. En las imágenes mostradas por la televisión local se ha podido ver, entre otros, a un hombre que llevaba en brazos a un niño de corta edad.
Hollande llama a la "vigilancia" y a la "unidad"
El presidente francés, François Hollande, ha confirmado que cuatro personas han muerto durante el secuestro ocurrido en París y ha felicitado a las fuerzas de seguridad por el modo en que han gestionado las dos tomas de rehenes ocurridas en la capital y una localidad cercana en el noreste.
Hollande se ha dirigido a la nación tras las operaciones policiales lanzadas este viernes por la tarde: en una imprenta de Dammartin-en-Goële en la que se habían atrincherado los hermanos supuestamente responsables del ataque contra 'Charlie Hebdo' y en un supermercado judío de París tomado por el autor de un tiroteo en el que murió una agente de la Policía.
Las operaciones concluyeron con la muerte de los tres atacantes, así como de cuatro de los rehenes capturados en la tienda parisina, según Hollande. El presidente ha expresado "toda su solidaridad" para las familias de fallecidos y heridos.
Hollande ha aplaudido la "valentía" y "eficacia" con la que han actuado tanto la Policía como la Gendarmería, tal como hiciese poco antes el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve. Gracias a su actuación, ha añadido, se ha podido "salvar vidas humanas".
El mandatario galo ha advertido de que la "amenaza" todavía no ha terminado, por lo que ha apelado a la "vigilancia, unidad y movilización" de todo el país. "De esta prueba saldremos todavía más fuertes", ha dicho en otro momento de su alocución desde el Elíseo.
Como ya hiciese tras los tiroteos del miércoles, el presidente ha subrayado que la "unidad" es "el mejor arma" que tiene Francia para hacer frente a los "asesinos". En este sentido, ha instado a "todos los franceses" a salir "juntos" el domingo en manifestación para defender "la democracia, la libertad, el pluralismo".
Religión
Hollande ha considerado "antisemita" el asalto al supermercado judío de París y ha prometido ser "implacable" contra cualquier tipo de práctica racista.
En un llamamiento a la concordia interreligiosa, ha recalcado que los "iluminados" que han atentado en Francia en los últimos días "no tienen nada que ver con la religión musulmana.