Chen ha asegurado en un comunicado que la NYU ha solicitado que tanto él como su familia abandonen la institución a finales de este mes. "De hecho, desde el pasado mes de agosto y septiembre, los comunistas chinos empezaron a aplicar una gran e implacable presión sobre la Universidad de Nueva York", ha declarado el disidente. "Tanta que, apenas tres o cuatro meses después de nuestra llegada a EEUU, la NYU empezó a discutir con nosotros nuestra partida", ha añadido.
Según el diario 'The New York Post', la institución neoyorquina en la actualidad trabaja en estrecha colaboración con China para establecer un campus en la ciudad de Shangai.
"La actividad de los comunistas chinos en los círculos académicos de Estados Unidos es mucho mayor de la que la gente se imagina", ha señalado Chen. "La independencia académica y la libertad académica en Estados Unidos están siendo gravemente amenazadas por un régimen totalitario", ha advertido, según recoge la CNN.
La NYU, por su parte, ha publicado su propio comunicado en el que niega las acusaciones del disidente chino. "Desde el principio, la NYU acogió con gran alegría al señor Chen y a su familia en Estados Unidos y les ayudó a abrazar el comienzo de su nueva vida", ha expresado el portavoz de la institución, John Beckman.
"Estamos muy desanimados tras conocer el comunicado del señor Chen, que contiene una serie de especulaciones sobre el papel del Gobierno chino en la decisión tomada por la NYU que son falsas y que contradicen los hechos", ha declarado Beckman.
BECA DE UN AÑO
Según la Universidad, la beca le fue concedida a Chen por un período de un año. "La beca del señor Chen en la NYU y su finalización no tiene nada que ver con el Gobierno chino. Todas las becas empiezan y acaban. Incluso antes de su llegada, la beca del señor Chen era de un año", ha añadido el portavoz de la NYU.
"El señor Chen tiene actualmente dos ofertas extremadamente atractivas para su próxima afiliación institucional", ha revelado Beckman. "Comenzamos a hablar con la familia Chen sobre su traslado futuro durante sus primeros meses en el país, no por culpa de una 'presión' ficticia de China, sino para que pudieran usar esos meses para realizar de forma tranquila ese período de transición. Nos decepciona que ese tiempo no haya sido empleado de forma más sabia", se ha lamentado.
Beckman ha reconocido que la Universidad está "desconcertada y entristecida" por las acusaciones vertidas por Chen, pero que ésta continuará trabajando con la familia para ayudarles en su traslado.
Chen fue puesto bajo arresto domiciliario en septiembre de 2010, tras permanecer cuatro años en la cárcel, por denunciar prácticas ilegales llevadas a cabo por las autoridades regionales en el marco de la política del hijo único, como abortos forzados y un programa de esterilizaciones. Sin embargo, en abril de 2012 logró escapar de su prisión y corrió a refugiarse a la Embajada de Estados Unidos de la capital china, Pekín.