"Las hostilidades están estallando en todo el país y el Gobierno libanés ha fracasado a la hora de garantizar la protección de los civiles, de la misma forma que ha fracasado a la hora de poner fin a la participación de las milicias de Hezbolá en el conflicto en Siria", ha valorado la organización.
El comunicado ha llegado apenas un día después del alto el fuego pactado entre el Ejército y las milicias del jeque salafista Ahmed al Assir en los alrededores de la mezquita Bilal bin Rabah de Sidón, en la que predica el clérigo.
En los enfrentamientos han fallecido al menos doce militares, según cifras oficiales, si bien algunas fuentes citadas por medios libaneses han informado de 17 militares y más de una veintena de milicianos muertos.
En su sermón del viernes, Al Assir, conocido por su radical oposición a Hezbolá y al Gobierno del presidente sirio, Bashar al Assad, advirtió a los militares "especialmente a los suníes" de que "no lleven a cabo ninguna misión que perjudique a sus hermanos suníes de Líbano". De lo contrario "rendirán cuentas el día del Juicio Final".
El clérigo ha saltado a primera línea informativa en los últimos meses tras llamar a la 'yihad' contra Hezbolá y las tropas del presidente sirio y cruzar la frontera común para visitar a varias brigadas islamistas radicales que combaten contra las fuerzas gubernamentales en el país.
Asimismo, la CNFORS ha destacado que Egipto "atraviesa dificultades", por lo que ha pedido a los sirios residentes en el país que "eviten participar en cualquier manifestación, independientemente de quién la organice".
"La CNFORS recalca que los sirios residentes en el extranjero han de permanecer al margen de toda acción inconsistente con los valores y principios de nuestra honorable revolución", ha añadido.
Por último, ha solicitado igualmente que los expatriados "no den pasos que puedan afectar a la soberanía de los países vecinos ni infrinjan las leyes ni los derechos básicos de la población de dichas naciones".