Aunque con menos intensidad que durante la noche, los combates continúan en la capital económica de Costa de Marfil, Abiyán, en lo que parece ser el último gesto de resistencia para los pocos soldados y milicianos aún fieles a Gbagbo, tras la rendición del Ejército, la Gendarmería y la Policía.
Los ataques comenzaron después de la nueva negativa de Gbagbo al ultimátum del primer ministro de Ouattara, Guillaume Soro, quien le exigió que cediera el poder antes de las 19.00 GMT de ayer.
Anoche se escucharon potentes disparos con armas pesadas en tres puntos de la ciudad: la sede de la televisión estatal (RTI), la residencia oficial de Gbagbo y el Palacio Presidencial.
Mientras que la RTI cayó rápidamente en manos de las FRCI y dejó de emitir poco antes de las 23.00 GMT de ayer, la situación está siendo distinta en la residencia y en el Palacio Presidencial, donde las fuerzas favorables Gbagbo oponen una tenaz resistencia.
Otro foco resistente de las FRCI es Agban, el mayor cuartel del país, donde se han encerrado algunos oficiales de la Policía, entre ellos el capitán Abehi, uno de los estrategas de las Fuerzas de Defensa y de Seguridad (FDS, leales a Gbagbo), y el coronel Séka Séka, ayudante militar de la esposa del presidente saliente.
Algunos analistas suponen que, dada la presencia de ambos militares en el cuartel, Gbagbo se encuentra también allí, ya que está en paradero desconocido desde el comienzo de esta ofensiva.