Al parecer, las ventas se producían a través de dos agentes norcoreanos, identificados como Chol Han y Ju Ok Hui, que se presentaban como directores de la Compañía de Comercio Internacional Nuevo Oriente.
La empresa, que desapareció en 2009, se habría encargado de transportar la mercancía desde Corea del Norte a otros países de la región, entre ellos Birmania, de acuerdo con la agencia de noticias Xinhua.
Para realizar las transacciones comerciales, Chol y Ju utilizaban pasaportes falsos. Entre 2004 y 2008 han sido hallados en posesión de documentos de identidad de Corea del Norte y de Seychelles.
Actualmente, se cree que actúan desde otra ciudad asiática, aunque no se sabe cuál, con pasaporte de Kiribati, un archipiélago ubicado en el centro del océano Pacífico.
El diario chino asegura que en los últimos años decenas de pequeñas empresas han cerrado negocios con agentes norcoreanos, al tiempo que embarcaciones con bandera del régimen comunista han atracado en territorio chino.