El partido opositor ecuatoguineano Convergencia para la Democracia Social (CPDS) ha asegurado que la Mesa de Diálogo Nacional celebrada en el país africano ha sido "un gran fracaso" porque el régimen que preside Teodoro Obiang Nguema ha impuesto su "monólogo intransigente", por lo que le ha reclamado que impulse un "diálogo franco" para afrontar los verdaderos problemas de los ecuatoguineanos.
"Los abajo firmantes consideramos que el diálogo político nacional que ha celebrado el presidente Obiang con tantas prisas, tanta exclusión, tantas restricciones y tanta intransigencia, es un gran fracaso", ha afirmado CPDS, en un comunicado conjunto firmado también por las formaciones opositores Unión Popular (UP) y Fuerza Demócrata Republicana (FDR).
En su opinión, la Mesa de Diálogo no puede llamarse así porque "ha sido un monólogo intransigente del Gobierno", que ha actuado "como juez y parte". "La libertad de expresión de la oposición ha sido conculcada; se han eludido los verdaderos problemas políticos, sociales y económicos que afectan al país y que podrían conducir a un estallido social. Tal como se ha desarrollado, el dialogo no ha sido ni aceptable ni creíble y no se puede esperar de él ningún cambio notable para la sociedad", han afirmado los tres partidos opositores.
CPDS, UP y FDR han asegurado que el proceso de Diálogo debería haber consistido en un debate profundo desarrollado "en el tiempo que fuera necesario" y centrado en estudiar "los problemas que hacen difícil la convivencia entre los guineanos" y proponer "soluciones" y que desembocaría en la formación de "un gobierno de Unidad Nacional que organizara elecciones libres y transparentes escalonadas en el tiempo".
"TAN SOLO CINCO DÍAS" DE DIÁLOGO
"El Gobierno ha pretendido poder resolver en tan solo cinco días de un pseudo debate los graves males de que padece la sociedad ecuatoguineana. No contento con sus 35 años en el poder, el presidente Obiang ha vuelto a elegir el inmovilismo. Ha sellado el fracaso de un diálogo esperado por el pueblo de Guinea Ecuatorial", han asegurado.
Las tres formaciones opositoras han lamentado que Obiang haya realizado sendos discursos de apertura y de cierre del proceso con "un tono impropio de un ambiente de diálogo y concertación" y que la delegación del Ejecutivo se haya comportado "con imposición e intransigencia" en la cita.
"Esta intolerancia de la parte gubernamental ha sido el primer signo de la falta de voluntad de diálogo y concertación del Gobierno", han dicho. Los tres partidos opositores han criticado que el Gobierno no haya aceptado "enmiendas" en el reglamento ni en el orden del día de las conversaciones.
NO SE HAN ABORDADO LOS "VERDADEROS PROBLEMAS"
En su opinión, el Ejecutivo se ha negado a dar la palabra a la oposición y a abordar "los verdaderos problemas" que sufren los ecuatoguineanos. Por estos motivos, las tres formaciones han justificado su retirada de la Mesa de Diálogo Nacional.
"La oposición es la que presentó la propuesta de diálogo al jefe del Estado. Sus cuestiones previas y sus peticiones esenciales, tales como la liberación de los presos políticos, la legalización de los partidos políticos, el libre acceso de los partidos a los medios de comunicación, la eliminación de las facciones creadas por el Gobierno en el seno de los partidos políticos o la creación de una junta electoral independiente, no fueron atendidas", han asegurado.
Tras asegurar que no es cierto que las pretensiones que han planteado al Gobierno no se ajusten a la legislación, han subrayado que "lo que sí contraviene la ley" es que el Ejecutivo anuncie una amnistía y acabe liberando solo "a dos mujeres del grupo de presos políticos" que había señalado como presos comunes, "dejando a las otras personas que fueron juzgadas con las referidas mujeres en el mismo sumario".
En este sentido, han reivindicado que su exigencia de que el Gobierno no autorice las facciones de UP y CPDS que ha impulsado para dividirlas "no contraviene ninguna ley". "Crear dichas facciones y admitirlas como actores en la Mesa de Diálogo", ha asegurado, "sí que contraviene de manera escandalosa" la legislación ecuatoguineana.
En respuesta a las acusaciones que les lanzó en su último discurso Obiang, que les llamó "radicales" y aseguró que intentaban "socavar el orden constitucional", CPDS, UP y FDR han hecho hincapié en que "plantear la necesidad de abordar" los problemas de Guinea Ecuatorial "no puede considerarse como un deseo de crear disturbios sino todo lo contrario, de evitarlos".
Los tres partidos opositores han acusado al Ejecutivo de querer trasladar a la oposición "su propia intransigencia" y "su intolerancia" y ha asegurado que, tras su retirada del diálogo, "uno de los viceprimeros ministros propuso" que los opositores fueran "detenidos y azotados", "mientras otro profería amenazas" contra ellos y "advertía de severas consecuencias" por su actitud.
"La firma de los acuerdos por grupos que apenas asistieron a dos sesiones de trabajo y que son individuos traídos por el Gobierno sólo para hacer número denotó claramente la falta de seriedad del encuentro de Sipopo", han explicado.
LOS TEMAS YA HABÍAN SIDO TRATADOS ANTERIORMENTE
En esta misma línea, han criticado la "falta de seriedad" del Gobierno de Malabo porque en la Mesa de Diálogo ha vuelto a tratar "temas sobre los que ya se habían alcanzado acuerdos en revisiones anteriores". Entre otros, ha mencionado la "pretendida supresión de la fianza de 30 millones de Francos CFA" y el tema de "las cuotas" que la formación gubernamental PDGE "sigue cobrando directamente a todos los funcionarios y empleados" en las nóminas "sin tener en cuenta su afiliación política".
"En esta Mesa de Diálogo, el Gobierno, infringiendo la ley, ha autorizado al PDGE a seguir haciendo lo mismo, siempre que dicha práctica no se extienda a los militantes de otras formaciones políticas. Ello significa un retroceso con respecto a lo acordado en 1993, pues con tal acuerdo se autoriza al PDGE seguir cobrando dichas cuotas, y supone una manera de intimidar a los trabajadores, ya que ninguno de estos se atreverá a negar ser militante del PDGE para evitar dicho cobro", ha explicado.
Tras lamentar que el "régimen dictatorial" haya "fagocitado" con "sorprende facilidad" a "algunos partidos del interior" de Guinea Ecuatoria, CPDS, UP y FDR han subrayado que "se ha desaprovechado una oportunidad que hubiera servido para encontrar soluciones a los graves problemas políticos, económicos y sociales que aquejan" al país.
"Nada de lo discutido en Sipopo resuelve el problema de gobernabilidad que tiene el país ni el de las elecciones siempre fraudulentas ni la violación sistemática de los Derechos Humanos ni el de la corrupción que gangrena nuestra sociedad ni el de la pobreza que azota a nuestra población ni el de empleo de miles de ciudadanos ni el de acceso a sanidad y vivienda de las capas más pobres, que son la mayoría; no se ha abordado el tema de la situación de la enseñanza en nuestro país", ha asegurado.
Por último, las tres formaciones políticas opositoras han apostado por "idear nuevas estrategias destinadas a seguir forjando los cambios pacíficos que necesita el país" y han reivindicado "un diálogo franco para abordar, de manera seria y responsable, los verdaderos problemas políticos, económicos y sociales" que afectan a Guinea Ecuatorial, con el fin de "garantizar una convivencia pacífica y la estabilidad".