Las fuerzas de seguridad entraron en siete inmueble de los distritos de Tuzla y Ümraniye, en la parte asiática de la ciudad, y en los distritos de Bayrampasa, Zeytinburnu, Esenyurt y Basaksehir, en la parte europea y se incautaron de material digital y documentación.
Las autoridades turcas han deportado ya a más de 5.000 presuntos miembros del Estado Islámico y a 3.290 terroristas de 95 nacionalidades distintas en los últimos años. Además ha desmantelado varios pisos francos utilizados para apoyar al grupo en Siria e Irak y preparar atentados en suelo turco.