Al menos 51 detenidos por la redada en el bastión islamista de Kerdasa

EUROPA PRESS 20/09/2013 05:21

El operativo comenzó de madrugada, cuando las fuerzas de seguridad irrumpieron en Kerdasa para capturar a un centenar de sospechosos del ataque a una comisaría de Policía y la muerte de 11 agentes en el marco de la ola de violencia que se desató tras el desalojo de las acampadas de apoyo al ex presidente Mohamed Mursi, el 14 de agosto.

El portavoz del Ministerio de Interior, el general Hani Abdel Latif, ha detallado que las Fuerzas Armadas han rodeado Kerdasa y que la Policía ha entrado para realizar las detenciones.

A su llegada, los efectivos han encontrado una fuerte resistencia por parte de la población local, ya que Kerdasa es uno de los principales bastiones islamistas que rodean El Cairo. Desde el 14 de agosto, estaba abandonado por las autoridades interinas.

Así, se ha producido un fuerte enfrentamiento en el que ha habido intercambio de disparos y la Policía ha lanzado gases lacrimógenos. Como consecuencia de ello, el asistente del Director de Seguridad de Giza, Nabil Farag, ha muerto y otros diez uniformados han resultado heridos.

Si bien, las fuerzas de seguridad han conseguido su objetivo ya que han detenido a "decenas de hombres armados y terroristas", de acuerdo con el jefe de Investigaciones de la Policía, Mohamed El Sharkawy. Las fuentes consultadas por 'Al Ahram' han concretado que hay 51 arrestados.

"No pararemos hasta que hayamos limpiado Kerdasa de criminales y terroristas. La Policía va a seguir con su avance por el distrito", ha adelantado El Sharkawy.

El operativo de seguridad en Kerdasa ha seguido al llevado a cabo el pasado lunes en la localidad de Dalja, ubicada en la provincia de Minya, que estaba parcialmente controlada por los simpatizantes de Mursi. En total, fueron detenidas 56 personas.

"Kerdasa y Dalja son algunas de las consecuencias más negativas del régimen de Hermanos Musulmanes", ha considerado Latif, en alusión al movimiento islamista que llevó a Mursi a la Presidencia y que le respaldó durante su Gobierno.

Egipto está sumido en una crisis política desde el pasado 3 de julio, cuando las Fuerzas Armadas derrocaron a Mursi, apoyándose en las multitudinarias manifestaciones contra el giro islamista de su Gobierno. Desde entonces, está en paradero desconocido.

La Fiscalía ha acusado a Mursi y a otras 14 personas de incitar al asesinato y a actos de violencia por las protestas de diciembre de 2012, alegando que movilizaron a simpatizantes de Hermanos Musulmanes para que atacaran a los manifestantes antigubernamentales

Mursi también está acusado de insultar a la Judicatura y está siendo investigado por colaborar con la facción palestina Hamás y con el partido-milicia chií libanés Hezbolá y por su fuga de la prisión de Wadi el Natroun durante las revueltas contra el régimen de Hosni Mubarak.