Trump, un discurso del Estado de la Nación en su línea antiinmigración y alardeando de sus logros económicos

  • Presumió de la marcha de la economía por su gestión

Trump mantiene su línea antiinmigración en el discurso anual sobre el Estado de la Nación. El presidente de Estados Unidos ante el Congreso se ha mostrado exageradamente optimista sobre la marcha de la economía y ha dado gran protagonismo al autoproclamado presidente de Venezuela, Juan Guaidó.

Menos amistoso se mostró con la presidenta de la cámara, Nancy Pelosi a la que llegó a negar el saludo, a pesar de ser la tercera autoridad del país. La sombra del impeachment contra Donald Trump por sus presiones sobre el Gobierno de Ucrania para sacar ventaja electoral flota en el ambiente.

El discurso de Trump en el Capitolio ha estado marcado por la hostilidad entre republicanos y demócratas que empezó con el magnate dando la espalda a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, cuando ella le ha ofrecido la mano.

En respuesta, Pelosi, quien lidera la Cámara de Representantes, el órgano que ha sacado adelante el juicio político ('impeachment') contra el presidente --al cual no se ha referido durante su comparecencia--, ha roto el discurso de Trump una vez hubo finalizado.

Su discurso, sin embargo, destiló la propia esencia del presidente de EEUU: criminalizando la inmigración y presumiendo de sus logros económicos, gracias a su gestión.

"Si vienes ilegalmente, ahora serás expulsado de nuestro país", ha dicho Trump entre los vítores de los republicanos, para a continuación justificar sus ataques enumerando casos puntuales en los que algunos migrantes indocumentados cometieron a crímenes "a sangre fría".

Trump ha criticado la política migratoria del Partido Demócrata, a quienes ha acusado de proteger a los inmigrantes ilegales, a los que ha relacionado con la proliferación de la delincuencia, las drogas e, incluso, los ataques terroristas.

El mandatario también ha hecho referencia de los acuerdos fronterizos con México, Guatemala y El Salvador y ha subrayado la necesidad de seguir construyendo un muro en la frontera sur que ayude a contener la inmigración ilegal y acabar así con "las terribles lagunas explotadas por criminales y terroristas para ingresar" en Estados Unidos.

"La economía está mejor que nunca"

En su tercer discurso sobre el Estado de la Unión, Trump ha sacado pecho de sus políticas económicas, como demuestra, ha dicho, que con él al frente de la Casa Blanca la "economía está mejor que nunca".

"Desde las elecciones, hemos creado 2,4 millones de nuevos empleos. Las solicitudes de desempleo han alcanzado su nivel mínimo en 45 años. El desempleo entre los afroestadounidenses se encuentra en la tasa más baja jamás registrada y el desempleo de los hispanoamericanos también ha alcanzado los niveles más bajos de la historia", ha subrayado.

Trump también ha recordado que, tal y como prometió hace 11 meses, el Gobierno ha llevado a cabo "la mayor reforma de impuestos y el mayor recorte tributario en la historia de Estados Unidos", los cuales, ha dicho, "brindan un tremendo alivio a la clase media y las pequeñas empresas".

"Las empresas no se marchan, ahora todos tienen una segunda oportunidad", ha presumido el presidente estadounidense, quien durante los últimos tres años, ha asegurado, "ha destrozado el declive de la mentalidad derrotista" de Estados Unidos.