El drama de la familia Graham: pierden su casa en un incendio y después los siete dan positivo por coronavirus

Un incendio arrasó prácticamente todo lo que tenían. Las llamas que engulleron el 80% de Malden, una localidad de Washington, Estados Unidos, devoraron también la casa y casi todas las pertenencias de la familia Graham, compuesta por 7 miembros que se vieron, de repente, sin saber qué hacer ni dónde ir.

Todo comenzó cuando Matthew Graham y su esposa, Jessica, decidieron coger a sus cinco hijos, –Constantine, de 12 años; Claudia, de 10; las gemelas Adele y Zoe, de 7; y Darius, de 5–, para que conociesen a la nueva mascota del hermano de Matthew. Pensaban en hacer una simple visita y volver a casa por la noche, por eso ni siquiera se pararon a pertrecharse ni coger nada especial más allá de lo puesto.

Ese día, sin embargo, todo cambió cuando se desató un incendio forestal en la zona que, lejos de todo lo que pudiesen imaginar, iba a provocar que nunca más pudiesen regresar a la que era su casa.

Sin nada, y desolados, los siete se vieron obligado a buscar refugio en sus familiares más cercanos. Por eso, acudieron a los abuelos; a los padres de Jessica y Matthew. Fue junto a ellos como, para el pesar de todos, creen que comenzó su segundo calvario: el coronavirus.

Brote familiar de coronavirus: los siete, contagiados

Según creen, fue durante la estancia en familiar cuando pudo desencadenarse un brote de coronavirus entre ellos, provocando que, solo dos semanas después de perder su casa, los siete miembros de la familia diesen positivo por covid19.

Según recoge CNN, el padre de Jessica tenía síntomas similares a los de la gripe, mientras descubrieron que la madre de Matthew había dado positivo después de que se quedase al cargo de los niños.

“Nosotros empezamos a experimentar síntomas en ese mismo momento, pero esperábamos que fuese debido a la mala calidad del aire”, afirman, en declaraciones recogidas por el citado medio. Sin embargo, instantes después, cuando la calidad del aire mejoró, ellos lejos de ver mejoría empeoraron su estado de salud, sintiéndose exhaustos.

Mientras, si bien los padres de Jessica no experimentaron mayores problemas sin tener que acudir al hospital, la madre de Matthew desarrolló neumonía bilateral.

Los niños, afortunadamente, lo han llevado mucho mejor y, pese a tener fiebre puntualmente, están bien. Sus padres, mientras, creen estar ya recuperándose.

Ahora, en el frente les queda buscar un nuevo hogar y el desafío de planear una nueva vida. Para ello, vecinos de la zona se han volcado en la ayuda entregando juguetes y ropa para los niños, al tiempo en que a través de una campaña en GoFund Me ya les han donado 43.000 dólares, es decir, casi 37.000 euros.