Matthew Bailey (24 años) ha sido detenidos por las autoridades de Manchester (Inglaterra) tras ser acusado de "abusar psicológicamente" a su exnovia, Molly Cunliffe, a quien acosaba y "menospreciaba", ejerciendo una relación de excesivo control.
El joven detenido prohibía a su pareja enviar mensajes, a través de las aplicaciones de Snapchat y Facebook, a hombres a menos que estos fueran homosexuales. Tampoco permitía que la joven mandara emoticonos de besos al final de los mensajes.
Según informa Daily Mail, Bailey es una persona "muy celosa", ya que revisaba con frecuencia el móvil de su excompañera, le decía cómo tenía que vestir o le obligaba a mantener llamadas por Face Time para comprobar que la chica se encontraba en su casa o durmiendo. Asimismo, acusaba a Cunliffe de engañarle con otras personas cada vez que esta no respondía a alguna de sus continuas llamadas.
A pesar de querer cortar la relación por parte de la joven en varias ocasiones, el acusado amenazaba con matar a su familia si rompía la relación. Finalmente, la damnificada interpuso una denuncia contra su pareja, que fue encarcelado durante seis meses después tras ser declarado culpable de "participar en el control o el comportamiento coercitivo en una relación íntima".