Muerte y desesperación en las calles de Filipinas

Esperanza Calvo, desde Manila 12/11/2013 15:56

Los miles de muertos se acumulan en las calles de Filipinas con temperaturas que superan los 30 grados. La nueva amenaza es una epidemia por los cuerpos en descomposición y la llegada de una tormenta.

Los supervivientes del tifón llevan cortes en las piernas, el calzado destrozado, las uñas negras y ansiedad en la mirada. “La tormenta llegó y no estábamos preparados para ella” cuenta un americano que vive en Tacloban y que se refugió en el ático de su casa con su mujer y sus tres hijos durante dos días. “Casi morimos, el agua vino tan rápido que fue increíble”, asegura.

Todos llegan con miedo a la base aérea del Ejército filipino en Manila, desde donde sale ya la ayuda humanitaria. Ellos regresan del infierno, por eso sorprende encontrar otra imagen: los que quieren ir a él. “Mi familia tiene hambre y nadie les ayuda” dice otra joven. Van cargados de comida y agua escondida en bolsas de basura para evitar los pillajes.