Las sospechas giran en torno al dinero abonado a ciertas empresas a cambio, por ejemplo, del alquiler de espacios para celebración de mítines electorales. Según la emisora Franceinfo, el equipo de Macron se habría beneficiado de descuentos que superan los límites establecidos legalmente, de entre el 15 y el 20 por ciento.
El grupo del partido Los Republicanos en el Ayuntamiento de Lyon presentó el 19 de junio una queja ante la Fiscalía ante la posibilidad de que se hubiesen cometido irregularidades y de que el exalcalde Gérard Collomb, actual ministro del Interior, estuviese implicado en ellas.
El Ministerio Público finalmente ha accedido a examinar el caso para determinar si se pudieron haber cometido varios delitos, entre ellos desvío de fondos públicos o financiación irregular de una campaña electoral, según fuentes citadas por Franceinfo.
La República en Marcha, el partido fundado por Macron, ha negado cualquier irregularidad y ha publicado documentos con los que pretende acreditar que no ha habido ningún trato de favor ni ninguna ayuda enmascarada bajo descuentos en la contratación.