La investigación se abrió tras examinar el patrimonio de Jean-Marie Le Pen, aunque tras el análisis de los datos suministrados por la Alta autoridad para la Transparencia de la Vida Pública (HATVP) se ha ampliado a su hija, Marine Le Pen, según ha publicado el diario 'Le Monde'.
Ambos, según la Fiscalía, podrían haber infravalorado parte de los activos que corresponden a cada uno, de más de un millón de euros en el caso de Jean-Marie Le Pen y en varios cientos de miles de euros en el de su hija.
El organismo ha explicado que existen "serias dudas en cuanto a la integridad, la exactitud y la sinceridad" de sus declaraciones de la líder del partido francés de extrema derecha y de su padre, debido a que infravaloraron el valor del patrimonio que ambos tenían en común.
La justicia francesa podría castigarles con una pena de hasta tres años de prisión, 45.000 euros de multa y diez años de inhabilitación por no declarar parte del patrimonio o por hacer una falsa evaluación de los activos.
Jean-Marie Le Pen fue expulsado del partido por su hija el año pasado después de hacer varias declaraciones polémicas. Además es sospechoso de fraude fiscal, de blanqueo agravado.