Las fuerzas afganas recuperaron a finales de octubre el control de la ciudad, después de cerca de dos meses en manos de los talibán.
Archi fue utilizado por los talibán como una base para lanzar numerosos ataques en la provincia. Los insurgentes desde esta localidad la ciudad de Jan Abad, ubicada en sus alrededores, haciéndose con el control de la misma durante varios días.
La operación de las fuerzas de seguridad se enmarca en los esfuerzos de las autoridades por hacer frente al incremento de la presencia de los talibán en Kunduz. Los insurgentes se hicieron brevemente con el control de la capital provincial tamibén durante el mes de octubre.