El Gobierno kuwaití acata la sentencia del Constitucional sobre la Ley Electoral

Reuters/EP 25/09/2012 16:44

El veredicto ayudará probablemente a rebajar la tensión con la oposición, que había prometido echarse a las calles si el Constitucional se pronunciaba a favor del Gobierno, pero no resuelve el problema de cómo establecer un Parlamento que funcione.

En la anterior Asamblea, disuelta por un tecnicismo por el Tribunal Constitucional, los candidatos islamistas y tribales intentaron impulsar leyes islamistas al tiempo que se enfrentaron con el Gobierno por medidas económicas, incluido un importante plan de desarrollo económico.

La oposición había señalado que la petición del Gobierno al Tribunal de enmendar la Ley Electoral era un intento para favorecer a los candidatos afines al Ejecutivo en las nuevas elecciones. Tras el veredicto, todo apunta a que la nueva Asamblea será similar a la anterior en su composición.

En un comunicado, el Gobierno ha dicho que "aprecia" la decisión del Constitucional y que ha pedido a las autoridades pertinentes que estudien las implicaciones y consideren los siguientes pasos a dar, sin ofrecer más detalles.

Aunque en Kuwait es necesaria la aprobación parlamentaria para las principales leyes y el presupuesto, la monarquía mantiene un férreo control de las principales carteras y los partidos políticos están prohibidos.

"El veredicto del Constitucional significa que el Gobierno debería dimitir inmediatamente", ha afirmado el diputado islamista Faisal al Muslem en su cuenta en Twitter, pidiendo la convocatoria de elecciones parlamentarias.

"Este es un triunfo de la voluntad de la nación", ha señalado el también diputado islamista Waleed al Tabtabie a sus casi 250.000 seguidores en Twitter.

El Constitucional ya había provocado las iras de los manifestantes en otra sentencia este año que decretó la disolución del Parlamento, dominado por la oposición, elegido en febrero. La anterior Asamblea más próxima al Gobierno que reinstaurada por el tribunal no fue capaz de reunirse debido al boicot de algunos diputados.