La Estrella de David Roja (equivalente a la Cruz Roja) ha anunciado que las víctimas mortales quedaron atrapadas por las llamas cuando viajaban en un autobús, en su mayoría guardias de una prisión y miembros del dispositivo de emergencia.
"Hay muchas víctimas", ha apuntado a los medios el ministro de Seguridad Interior, Yitzhak Aharonovitch.
El portavoz de la Estrella de David Roja, Eli Bin, ha declarado que a última hora del jueves ya habían sido identificados 22 cuerpos y ha confirmado que los servicios de socorro trabajan con la posibilidad de que personas desaparecidas puedan haber sido víctimas de las llamas.
Miles de evacuados
Más de 15.000 israelíes han abandonado sus domicilios a causa de un incendio originado en el bosque Carmel, aparentemente por la quema de basura en un vertedero ilegal de la zona.
Los servicios de emergencia han evacuado el barrio Denia de esa localidad, así como a varios residentes de Tirat Carmel, una pequeña ciudad ubicada al sur de Haifa, informaron miembros de Protección Civil.
Un kibutz, un hotel, la Universidad de Haifa, una aldea drusa y la citada cárcel, con 500 presos, han sido desalojados, mientras que el kibutz de Bet Oren, que también había sido evacuado, ha desaparecido del mapa.
Llamas sin control
Los bomberos y numerosos equipos de emergencia que colaboran en la extinción del incendio no han logrado todavía controlar las llamas, cuya virulencia ha causado estragos en las áreas como el kibutz de Bet Oren, que según ha explicado un testigo a la radio pública israelí, "sencillamente ha desaparecido del mapa".
Aviones de ayuda
Mientras, a primera hora de la mañana ha comenzado a llegar la ayuda internacional, con un avión búlgaro con cien bomberos; cuatro helicópteros de emergencia enviados por Grecia, uno por Chipre y otro por Azerbaiyán.
Se espera que a lo largo del día llegue a Israel la cooperación de España, que consiste en cuatro helicópteros, así como la de Turquía, Egipto, Jordania, Francia, Croacia, Rusia y Rumanía.
El Fondo Nacional Judío calcula ya en 5.000 el número de acres (unas 2.000 hectáreas) arrasados por el incendio. EPF