El primer ministro de Irak, Nuri al Maliki, y el ministro de Exteriores de Irán, Alí Akbar Salehi, han reiterado este viernes su oposición a las sanciones económicas y financieras impuestas por la Unión Europea, Estados Unidos y la Liga Árabe a Siria
Así, Al Maliki ha dicho que "estas sanciones dañan a los civiles del país sobre el que se imponen". "Rechazamos la imposición de cualquier país, sin importar la razón, porque esto daña a la población civil, no a los regímenes", ha dicho, según ha informado la agencia estatal de noticias siria, SANA.
En las últimas fechas, Bagdad ha reiterado su oposición a la decisión de la Liga Árabe de imponer sanciones económicas y financieras a Siria y ha recalcado que no se unirá a ellas.
Por su parte, Salehi ha mostrado su oposición a cualquier medida que allane el camino a una intervención extranjera en Siria. En este sentido, ha explicado la postura de Irán respecto al conflicto y ha criticado la manera en que se está manejando la situación por parte de la comunidad internacional.
Asimismo, Salehi ha alabado la resistencia de Damasco frente al "régimen sionista" (en referencia a Israel) y ha enfatizado que las reformas han de ser implementadas y que han de tomarse las medidas necesarias para impedir que países extranjeros interfieran en los asuntos internos del país.
Además, ha expresado su deseo de que el Gobierno sirio "continúe ayudando a mejorar la seguridad regional, apoyando al pueblo palestino y promoviendo el estado del bienestar de los ciudadanos sirios a través de negociaciones constructivas y efectivas con el pueblo".
Para ello, Salehi ha pedido un papel activo de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) en la resolución de los problemas a los que se enfrenta el mundo musulmán, "especialmente en lo relativo al problema palestino", según ha informado la agencia de noticias iraní Mehr.