El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha anunciado este domingo que el Gobierno israelí solicitará formalmente y por vía diplomática a Estados Unidos que permita a Jonathan Pollard, condenado a cadena perpetua en 1987 por espionaje, viajar a Israel para asistir al funeral de su padre.
Netanyahu aprovechó una reunión con los ministros de su partido, el conservador Likud, para realizar el anuncio y se suma así a la petición de la familia de Pollard, que ya ha anunciado una concentración ante la Embajada estadounidense en Tel Aviv para el próximo jueves.
El padre de Pollard, Morris Pollard, falleció el sábado a los 95 años de edad en un hospital de Indiana (Estados Unidos), pero será trasladado a Israel para ser enterrado.
Pollard, un agente de la inteligencia civil de la Marina estadounidense, vendió secretos militares a Israel mientras trabajaba para el Pentágono. Fue detenido en 1985 y declarado culpable de espionaje y condenado a cadena perpetua dos años más tarde. Desde entonces se ha convertido en un icono para la derecha israelí.
Mientras, desde la bancada árabe-israelí diputados como Ahmed Tibi rechazan la petición, que consideran un ejemplo de la "típica hipocresía israelí". "Israel niega a los prisioneros palestinos las peticiones para asistir a los funerales de sus padres. ¿Que responderíais a los americanos si os dicen que han decidido actuar igual que actuáis vosotros con los presos palestinos?", ha afirmado Tibi en declaraciones recogidas por el diario 'Yedioth Aharonoth'.
Sin embargo, diputadas del opositor Kadima como Ronit Tirosh han asegurado que no irán a la fiesta del Día de la Independencia que ofrece todos los años la Embajada estadounidense en protesta por el tratamiento que está recibiendo Pollard.