Tres semanas después del inicio de la crisis y tras 15 muertos el Estado de Táchira, fronterizo con Colombia, sufre la represión más violenta del Gobierno chavista, sin luz, con las calles cortadas y los comercios cerrados. Los opositores siguen difundiendo al mundo a través de las redes sociales la imagen del presidente Chávez derribado, fallecido pero presente en el actual Gobierno. Mientras el presidente Maduro comienza una conferencia de paz sin la oposición y con los organismos internacionales piden cordura.