Un joven refugiado sirio murió este lunes después de que las fuerzas de seguridad atacaran varias aldeas próximas a Turquía con el objetivo de impedir la huida de civiles a través de la frontera, según informaron fuentes locales.
Adelsalam Hassun, de 24 años y herrero de profesión, falleció por los disparos de los francotiradores del Ejército justo después de entrar en Turquía procedente de la aldea siria de Ain al Baida, según informó un primo del joven a Reuters desde territorio sirio.
"Abdelsalam fue alcanzado en la cabeza", explicó Mohamed Hassun. El tiroreo se produjo en la mañana de este lunes, cuando el joven se encontraba junto a varios familiares y a otros refugiados que acababan de atravesar la frontera con Turquía.
Fue en ese momento, precisó el primo, cuando "se desplegaron seis vehículos acorazados de transporte de personal en la salida de Ain al Baida y empezaron a disparar indiscriminadamente".
Se trata de la primera operación militar de envergadura en la frontera desde el pasado mes de julio, cuando miles de familias sirias huyeron de sus casas para escapar de la ofensiva lanzada por el Ejército contra numerosas aldeas y ciudades en las que se habían registrado importantes manifestaciones contra el régimen de Bashar al Assad.