"Suponemos que hubo algún desperfecto en los frenos"

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 23/02/2012 07:21

Las autoridades investigan las causas del siniestro e intentan explicar por qué el convoy, con los vagones repletos de gente en plena hora punta, no pudo frenar a tiempo. El secretario de Transporte de Argentina, Juan Pablo Schiavi, ha explicado que el accidente ocurrió cuando "un tren que entraba a la terminal de Once a 26 kilómetros por hora en la punta del andén".

"Suponemos que hubo algún desperfecto con los frenos. El tren impacta a 20 kilómetros por hora contra el paragolpes, esto produjo que se plegara un tren sobre otro", ha explicado.

Balance de víctimas

El balance de víctimas ha ascendido a 50 muertos y 676 heridos, según ha informado el subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno local, Claudio Avruj, a la agencia de noticias Télam.

Entre los fallecidos hay una menor de edad, mientras que el resto son adultos, según ha indicado el portavoz de la Policía Federal, Néstor Rodríguez. De momento, han sido identificados 39 cadáveres, que ya han sido trasladados al cementerio de Chacarita. Los once restantes siguen en la morgue.

Además, el número de heridos ha ascendido a 676. La mayoría han sido atendidos en hospitales públicos, aunque algunos han preferido ser trasladados a hospitales privados. El ministro de Salud de Buenos Aires, Jorge Lemus, ha explicado que, del total de heridos, al menos 200 presentan heridas graves, aunque ha aclarado que "ninguno ésta en estado crítico", por lo que no se teme por su vida.

"Fue un impacto brutal"

Los testimonios de los testigos permiten hacerse una idea de lo dramático de la situación. "Yo dije 'cuidado, el tren no frena'. Me tiré hacia atrás porque pensé que me atropellaba. Fue una explosión terrible, un impacto brutal", explicaba a Reuters Alfredo Velázquez, de 33 años, que estaba en la estación de Once cuando se produjo el accidente y rescató a dos mujeres adultas.

"Vi a dos nenes volar por la ventana, estaban atrapados a mitad del cuerpo", cuenta otro de los testigos. "En el segundo vagón estaban todos estre los hierros, había gente pedía ayuda que vomitaban sangre", explica otro de los afectados.