Netanyahu acusa a Abbas de no querer participar en un proceso de negociaciones de paz

EUROPA PRESS 10/06/2015 06:09

"Los palestinos tienen un truco en el que se niegan todo el rato a hablar y luego piden un boicot contra Israel y presentan demandas ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas argumentando que nos negamos a conversar", ha dicho.

"He ido a hablar con Abbas durante seis años y medio y tuve que hacer cosas difíciles para mí, como congelar los asentamientos durante casi un año, y en el décimo mes acordamos una reunión", ha relatado Netanyahu.

"Nos encontramos tres horas en Sharm el Sheij y tres horas en Jerusalén, y tenía una petición: que continuara la congelación de los asentamientos. Le pedí que renovara las negociaciones sin condiciones previas", ha agregado.

Así, ha lamentado que "Abbas puede hacer movimientos a nivel internacional sin acudir a unas negociaciones y después acusar a Israel de no querer hablar", argumentando que estas acciones unilaterales serán contraproducentes.

Por ello, ha expresado su deseo de que los países árabes presionen a Palestina para que vuelva a la mesa de negociaciones. "Puede haber una apertura, ya que algunos países están de acuerdo en silencio con mi posición (...) y podrían influenciar a los palestinos para que adopten una posición más conciliadora y positiva", ha explicado.

Netanyahu ha reiterado la necesidad de que cualquier acuerdo garantice la seguridad de Israel. "No es una excusa, son situaciones reales y necesitamos negociar el reconocimiento de dos estados con acuerdos reales de seguridad", ha remachado.

LA AMENAZA IRANÍ

En otro orden de cosas, ha insistido en que Irán supone una amenaza para Israel y los países de la región, apuntando que el fin de las sanciones contra Teherán le darán un margen económico vital para continuar con sus actividades.

"Una vez que las sanciones sean retiradas habrá cientos de miles de millones de dólares que impulsarán la agresión iraní", ha advertido, antes de enumerar otras amenazas que supone el país, como la entrega de armas avanzadas a sus aliados regionales.

Por último, Netanyahu ha manifestado que otras amenazas son el partido-milicia chií libanés Hezbolá, al que ha acusado de contar con agentes que operan en 30 países, los ciberataques, y la producción de armas avanzadas como 'drones', satélites y submarinos.

En noviembre de 2013, el Grupo 5+1 e Irán lograron cerrar un acuerdo preliminar de seis meses de duración, por virtud del cual Teherán se comprometió a congelar parte de su programa nuclear a cambio del levantamiento de algunas sanciones.

Los siete interlocutores acordaron en julio darse cuatro meses más, hasta el 24 de noviembre, para tratar de llegar a un acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iraní, tras admitir ambas partes que persistían "diferencias significativas".

Sin embargo, las partes no lograron cerrar un texto definitivo para esa fecha, por lo que decidieron darse hasta el próximo 1 de julio para zanjar de una vez por todas la controversia sobre el programa nuclear iraní.

El acuerdo definitivo contemplaría que Irán pueda mantener un programa de enriquecimiento de uranio dentro de unos términos pactados y limitados. A cambio, la República Islámica debe despejar todas las dudas sobre la naturaleza exclusivamente pacífica de su programa.