Un adolescente de 19 años, conocido por la prensa india como 'Pintu', ha sido condenado a pena de muerte tras ser acusado de un delito de violación a una niña de siete meses. El joven secuestró a la víctima de su propio domicilio mientras se encontraba bajo el cuidado de su abuela, parcialmente ciega. Después de un juicio de 22 días, el joven ha sido declarado culpable.
Tras sacarla de la casa, situada en Rajastán (India), el acusado se la llevó hasta un centro escolar, donde abusó de ella. Unos testigos encontraron al bebé llorando en la acera y lo trasladaron a un centro médico, donde confirmaron que la pequeña había sido violada tras examinarla, según informa Times of India.
El joven conocido como Pintu es el primer acusado en enfrentarse a la pena de muerte después de que el país aprobara una nueva ley que introdujo la pena capital para las personas que violen a menores de 12 años, vigente desde el mes de abril de este año. Asimismo, sentencia a cadena perpetua a quienes cometan el mismo delito con menores de 16 años.
En declaraciones recogidas por Daily Mail, la presidenta del comité estatal de mujeres, Suman Sharma, ha manifestado que este caso "servirá de precedente" y "aliviará a las madres que se preocupan por la seguridad de sus hijas".
"Esta es la primera vez en el estado que el acusado ha sido condenado en tan poco tiempo", ha expresado el fiscal al diario local.