Perdido y desorientado en un paraje del Ártico ruso, un perro es rescatado por un gigantesco rompehielos

  • La tripulación de un gigantesco rompehielos le socorrió y le llevó de vuelta a casa

  • El perro llevaba una semana perdido después de escaparse de la vivienda de su dueña

  • EL animal tenía dificultades para moverse debido al daño que había sufrido en las patas por el hielo

Perdido y en medio de un gélido paraje del Ártico ruso, un grupo de marineros de un rompehielos se percataron de la presencia de un visitante inesperado: un pequeño perro blanco que, fusionándose con la superficie helada, parecía moverse con serias dificultades.

En un primer momento, el animal parecía mostrarse reacio y temeroso ante la llamada de la tripulación, mirando, como dubitativo, sin saber qué hacer.

Como ha relatado el propio capitán del rompehielos que encontró al can, se encontraban en ese instante a menos de 10 kilómetros de una zona habitada, y ante la situación ordenó colocar una escalera para que el animal pudiese ascender al barco, algo que finalmente consiguieron.

Una vez el perro estaba a bordo, se realizaron distintas llamadas con el objetivo de intentar localizar con sus posibles dueños.

El animal tenía las patas dañadas por el hielo

Tras la odisea, gracias a un aerodeslizador, el animal poco después estaría de vuelta en casa, junto a su legítima dueña, que confesó que le costó reconocer al perro en un principio. Parecía estresado y tenía dificultades para caminar debido al daño que había sufrido en las patasdañopatas por el hielo.

Al parecer, el animal llevaba una semana perdido después de escaparse de la vivienda, y desde entonces, desorientado, todo acabó en un peligroso periplo que acabó con el auxilio de uno de los gigantes encargados de permitir la navegación en el Ártico.