Según este grupo, entre los fallecidos hay 65 civiles, 42 milicianos insurgentes, dos militares desertores y 62 soldados del Ejército del régimen del presidente Bashar al Assad.
Los medios estatales han informado de que el Ejército ha desalojado a los rebeldes de sus posiciones en Qudsaya y Hameh, a las afueras de Damasco, en el sur del país.
Precisamente el Observatorio informa de que en la provincia de Damasco, en Hameh, han sido hallados los cuerpos de diez hombres, uno de ellos un miliciano sublevado, con heridas de bala que habrían sido ejecutados por las fuerzas del régimen. "Murieron a manos de las fuerzas del régimen, que en los últimos han desplegado una gran operación militar en esta localidad, ahora bajo su control", explica el Observatorio.
En cambio, los insurgentes habrían logrado avances en el norte del país, donde se habrían hecho este sábado con la localidad de Jirbat al Yoz, cerca de la frontera con Siria. "Los enfrentamientos de Jirbat al Yoz (...) han terminado cuando los combatientes de las brigadas rebeldes tomaron el control de la zona", señala el Observatorio.
"Los combates han durado más de doce horas y han acabado con al menos 40 muertos entre las fuerzas regulares, incluidos cinco oficiales, y nueve combatientes" rebeldes, añade. Según el Observatorio, los insurgentes controlan ya un 80 por ciento de los pueblos y ciudades de la frontera turca.