Trump dice que el tiroteo de Texas no se debe a la violencia armada, sino a los "problemas mentales" del autor

Informativos Telecinco/Agencias 06/11/2017 09:26

"La salud mental es el problema aquí", ha contestado, interrogado acerca del control sobre las armas de fuego en Estados Unidos, durante la rueda de prensa que ha ofrecido junto al primer ministro de Japón, Shinzo Abe, en el marco de su visita a Tokio.

"Es un problema de salud mental al mayor nivel" porque, "de acuerdo con las primeras investigaciones, (el autor) era un individuo muy trastornado", ha explicado. "Ha sido un incidente muy, muy triste, pero así es como yo lo veo", ha recalcado, según informa CNN.

Trump ya se había pronunciado horas antes en un comunicado en el que ha expresado sus condolencias a los familiares de las víctimas y enviado un mensaje de unidad al pueblo estadounidense. "A través de las lágrimas y la tristeza, permanecemos fuertes", ha aseverado.

"Nuestros pensamientos y rezos están con las víctimas y las familias del ataque asesino de hoy (por el domingo) en Sutherland Springs, Texas", ha indicado en su comunicado, publicado por la Casa Blanca.

"Este horrible acto maligno ha tenido lugar mientras las víctimas y sus familias estaban en su lugar sagrado de culto. No podemos expresar con palabras el dolor y la pena que sentimos, y no podemos siquiera imaginar el sufrimiento de los que han perdido a sus seres queridos. Nuestros corazones están rotos", ha dicho.

"Sin embargo, en momentos oscuros como estos, los estadounidenses hacen lo que hacen mejor: unirse. Unimos manos. Juntamos nuestros brazos. Y a través de las lágrimas y la tristeza, permanecemos fuertes", ha agregado.

Asimismo, Trump ha recalcado que su Gobierno "está dando todo su apoyo a las autoridades estatales y locales para investigar este crimen horrible".

"He hablado con el gobernador (de Texas, Greg) Abbott y expresamos nuestro agradecimiento a los que respondieron en el lugar para detener al sospechoso y dar ayuda inmediata y vital a las víctimas del tiroteo", ha manifestado.

El presidente estadounidense, que se encuentra en Japón en el marco de una visita diplomática, ha subrayado que "seguirá de cerca los acontecimientos". "Todo Estados Unidos reza a Dios para ayudar a los heridos y a las familias. Nunca les abandonaremos", ha remachado.

El atacante irrumpió en la Primera Iglesia Baptista de Sutherland Springs, en Texas. El portavoz del Departamento de Seguridad Pública del estado, Freeman Martin, ha indicado que las víctimas mortales tienen entre cinco y 72 años, según ha recogido la cadena de televisión CNN.

Fuentes oficiales citadas por el diario 'The New York Times' han identificado al atacante como Davin P. Kelley, de 26 años, quien ha sido hallado muerto en el interior de su vehículo. Por el momento se desconoce si fue tiroteado o si se suicidó.

Martin ha agregado que el atacante entró en la iglesia y abrió fuego contra los presentes y que uno de ellos disparó contra él cuando se dio la vuelta para abandonar el edificio. Tras ello, el atacante tiró su arma y salió corriendo, llegando a su vehículo, con el que se estrelló poco después.

Tras el suceso, el gobernador de Texas ha descrito lo ocurrido como el peor incidente de este tipo en la historia del estado.

La portavoz de las Fuerzas Aéreas Ann Stefanek ha afirmado que Kelley fue miembro de un equipo logístico en la base aérea de Holloman, en Nuevo México, desde 2010 hasta que fue licenciado en 2014, agregando que compareció ante un tribunal militar en 2012 tras ser acusado de agredir a su esposa y su hijo.

Stefanek ha indicado que Kelley fue imputado por dos cargos de agresión según el Código de Uniforme de la Justicia Militar y condenado a doce meses de reclusión, así como degradado en su cargo.

Por su parte, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha publicado un mensaje en su cuenta en Twitter. "Que Dios esté con la gente de Sutherland Springs, Texas. El FBI y las fuerzas del orden están en el lugar. Sigo la situación desde Japón", ha indicado.