"La orden que voy a firmar es para proteger a trabajadores y estudiantes como vosotros", ha dicho Trump a alumnos y obreros desde la sede de Snap-On Tools, en Wisconsin, antes de estampar su rúbrica. "Estados Unidos primero. Ya es hora ¿no os parece?", ha remachado, haciendo uso del lema de su campaña electoral.
El objetivo primordial, según ha explicado el magnate neoyorquino, es "promover agresivamente el consumo de productos fabricados en Estados Unidos y garantizar que se contrata a trabajadores estadounidenses para hacerlos".
La orden ejecutiva incluye también una revisión del programa de visado para trabajadores cualificados, otro de los ejes, de acuerdo con una fuente gubernamental citada por la cadena estadounidense CNN. Trump pretende conceder estos visados bajo controles más estrictos para evitar posibles abusos.
"Ahora mismo, los visados H-1B se conceden con total discrecionalidad, como una lotería, y no está bien. En lugar de eso, deberían darse solo a los mejor cualificados y nunca, nunca, deberían ser usados para sustituir a estadounidenses", ha dicho Trump.
El jefe de Estado ha aprovechado la ocasión para volver a cargar contra el libre comercio. Así, no ha dudado en afirmar que la Organización Mundial del Comercio (OMC), cuyas normas está desafiando, "es otro desastre" de los gobiernos anteriores.
En alusión al tratado de libre comercio para América del Norte (NAFTA o TLCAN), del que también forman parte Canadá y México, ha insistido en que intentará negociar grandes cambios o, de lo contrario, acabará con él, como ya hizo con el acuerdo transpacífico.