Apuestas sobre el sucesor de Benedicto XVI

Ismael G. Uclés / Informativos Telecinco 10/03/2013 21:57

Segundo domingo de silencio papal en la plaza de San Pedro. Y probablemente el último. Dentro de una semana, si se cumplen los plazos previstos en las votaciones, se abrirá la ventana del apartamento del recién elegido pontífice para que oficie su primer rezo dominical. Pero antes tendrá que completarse un milimetrado ritual que arranca este lunes. A las cuatro y media de la tarde, todo aquel que tenga algo que ver con el cónclave tanto directa como indirectamente, desde los propios cardenales hasta los conductores o cocineros, jurarán guardar secreto sobre todo el proceso de elección. Las medidas de seguridad son extremas para evitar filtraciones. El martes, a las tres y cuarto de la tarde, na vez que se cierren las puertas, arrancará el cónclave en la capilla sixtina. Los 115 cardenales quedarán totalmente incomunicados con el exterior hasta que elijan al nuevo pontífice. En unas papeletas como éstas escribirán el nombre de su candidato. Sin poder elegirse a sí mismos. Tres cardenales recogerán los votos; otros tres se encargarán de contarlos y tres más revisarán el resultado. Las votaciones decisivas se esperan el miércoles, con dos escrutinios por la mañana y otros dos por la tarde. Para que haya fumata blanca por el nuevo papá serán necesarios 77 votos, dos tercios del total. Una elección en la que sigue figurando como favorito junto al italiano Angelo Scola, el brasileño de origen alemán Pedro Odilo Scherer, que este domingo ha oficiado una misa en Roma.