Dos días han bastado para que Nicolás Maduro se revuelva tras la victoria aplastante de la oposición. El presidente de Venezuela se muestra desafiante y asegura que no habrá amnistía ni liberación de presos políticos. Los opositores han obtenido 112 escaños y ya tienen mayoría calificada, un resultado difícil de digerir para Maduro, para quien han ganado los malos.