Seis meses después del tiroteo de Parkland, en Estados Unidos, en el que fallecieron 17 jóvenes, la escuela ha vuelto a abrir las puertas. La vuelta a las clases ha sido muy distinta a la de otros años: aunque se ha reforzado la seguridad, los estudiantes no olvidan a los compañeros fallecidos en aquella masacre.