El pequeño Juan Fernando González tuvo que ser operado después de consumir el peligroso menú, según publica el canal colombiano . 'RTU'
El niño acababa de ver una serie de televisión en la que una costurera se tragaba accidentamente una aguja y quiso vivir la arriesgada experiencia.
Los dolores de estómago lo obligaron a contárselo a sus padres y fue trasladado a un hospital de Huila, donde los médicos esperaron a que los objetos transitaran por sí mismo y fueran expulsados. Después de varias horas, esto no ocurrió y los especialistas decidieron realizarle un laparotomía para extraerle las agujas y el alambre.
Juan tuvo mucha suerte, porque los objetos no tocaron ningún órgano importante ni provocaron daños internos. "Afortunadamente las agujas y el alambre de similar tamaño, cumplieron con el tránsito digestivo ubicándose en el colon ascendente sin mayor complicación.
Este caso es milagroso porque hemos tenido situaciones en que con un solo cuerpo extraño tenemos lamentables resultados , explicó Juan Pablo López Rebellon, médico que realizó la operación. El paciente se encuentra estable y se recupera en una habitación".