Primavera afrodisíaca: los 9 frutos de temporada para una noche de lujuria

Ya no hay excusas. Rendir y disfrutar en la cama está asegurado, y no necesitas atiborrarte a viagra, ni leerte todos los capítulos del libro del Kamasutra. Tener al lado a tu pareja ideal y alimentarte con los nutrientes que activan tu rendimiento sexual es más que suficiente. Y estamos de enhorabuena: los afrodisíacos más efectivos los encontramos en primavera. Ya, en la Grecia Clásica, la diosa Afrodita (que pone nombre a estos excitantes) juntaba en sí misma el poder de la fecundidad y el de la energía primaveral, y es que no hay mejor estación para dar rienda suelta a tu pasión. Apunta los que te falten y confecciona una nevera 100% estimulante sexual.

La fruta que no falta en cualquier festín romántico. La fresa por su tacto y forma recuerda a zonas erógenas del hombre y la mujer. Hace miles de años que se conoce como un símbolo de vigor y fecundidad, y sus nutrientes estimulan las glándulas endocrinas y el sistema nervioso, haciendo que te relajes al máximo al lado de tu pareja. Sorprende a tu pareja combinándolas con nata o, si prefieres algo más especial, mézclalas con pasas y uvas, o en ensalada con manzana y pera. Y como colofón final: mete trocitos de fresa en champán y brindad juntos por el amor.

The Vegetarian Society propone una dieta infalible para potenciar tu poder sexual: tres días de espárragos. Esta verdura con forma tan sugerente contiene numerosas propiedades beneficiosas para nuestro organismo. Pero, además, este fruto típico mediterráneo ha tenido efectos afrodisíacos conocidos desde el Renacimiento, cuando se prohibía cocinarlos en los conventos por sus poderes sexuales. Se puede hacer a la plancha, salteado o simplemente hervido, y combina muy bien con una pizca de sal o un chorro de limón. No lo dudes y ponlo de guarnición durante la cena.

Esta fruta morada y azulada es buenísima para mejorar la vista, antioxidante y antiinflamatoria. Pero una de sus propiedades más potentes es la cantidad de vitamina C que contienen. Esto ayuda a concentrarte al máximo en el acto sexual y pone en forma tu cerebro para que recuerdes (a tiempo) que es lo que más le gusta a tu pareja y demuestres tus dotes sexuales. Asimismo, ayudan a que las células del esperma de los hombres no pierdan movilidad y naden como David Meca.

Se la ha apodado como la fruta más sexy y es que su color y su brillo son tan insinuantes que se han vuelto irresistibles en nuestros postres más sensuales. Según la tradición china, la cereza es un alimento muy rico en 'Qi' (chi), un energizante espiritual que favorece la estimulación sexual en el hombre. Además, sus pigmentos más oscuros, llamados antocianos, reducen el riesgo de disfunción eréctil en los hombres y la respuesta sexual en ambos sexos.

Su potencial afrodisiaco es más una leyenda que una teoría científica, pero es cierto que a lo largo de la historia se ha mostrado la alcachofa como la verdura de moda. En el siglo XVI, Catalina de Médicis popularizó entre la nobleza francesa un plato llamado Beatilles, que tenía, entre otras cosas, estas 'flores verdes' y que aumentaba el placer sexual, según se chismorreaba en el reino.

La mitología griega contaba que Eros, dios del amor, mojaba con el jugo de la ciruela sus puntas de flecha para hechizar a los mortales. En la tradición china, se usan para representar las zonas sexuales de la mujer y es un alimento rico en 'Qi', excitante para la mujer. A su vez, se dice que estimula la fuerza espiritual, las fantasías sexuales y las ganas de jugar en la cama.

¿No te lo crees? Una rodaja de sandía, además de calmarte la sed, podría tener efectos similares a los de la Viagra según un estudio en la Universidad de Texas (EEUU). La razón es que contiene citrulina, un nutriente capaz de relajar los vasos sanguíneos, el mismo mecanismo que utiliza la Viagra para evitar la disfunción eréctil e, incluso, prevenirla. El único inconveniente es que esta sustancia se encuentra, sobre todo, en su corteza (que no nos la comemos). Pero los científicos están investigando la posibilidad de producir nuevas variedades de la fruta con mayor citrulina en la pulpa.