Un experimento muestra la facilidad para contagiarse de coronavirus en las reuniones sociales

  • Una cadena pública japonesa ha compartido un experimento

  • En el estudio se ve lo fácil que es contagiarse en un 'buffet'

  • Sanidad alerta del riesgo de posibles rebrotes por nuevos contagios

La cadena pública japonesa NHK ha publicado un experimento que alerta de los riesgos de contagio del coronavirus en tan solo media hora. Para ello, reúne a un un grupo de diez comensales en un 'buffet', y a uno de ellos se le aplica una pintura fluorescente invisible a los ojos.

La cena se desarrolla con tranquilidad, y al apagar las luces, se puede observar cómo la pintura azul brilla por todas partes, desde los cubiertos y los platos hasta la ropa y las manos de otros comensales. Un claro ejemplo de que los contagios pueden producirse muy fácil y muy rápido si no se toman las medidas adecuadas.

Cuidado con los rebrotes

Las autoridades coreanas informaron el lunes de 35 nuevos casos de coronavirus, el mayor aumento diario desde el 9 de abril, lo que hace temer un repunte de la pandemia por sus principales focos de riesgo, que se encuentran en las discotecas de las grandes ciudades, especialmente Seúl.

En rueda de prensa tras el Comité Técnico de Gestión del Coronavirus, Simón ha alertado de que esta situación también se podría reducir en España, pese a que este lunes el incremento de casos es de apenas el 0,17 por ciento con respecto a ayer, si no se extreman las medidas de distanciamiento social e higiene para seguir garantizando la reducción de los contagios.

"Estamos en una situación muy favorable en la que realmente está empezándose a ver de forma muy clara que estamos en las últimas fases de la transmisión, pero hay un riesgo muy importante de repunte todavía", ha señalado, añadiendo que no todo "está ganado", ya que "hay que tener mucho cuidado, teniendo en cuenta los aumentos de positivos en Corea o Alemania de los últimos días. "Estamos en una fase muy delicada en la que si no hacemos las cosas bien podemos pasar a situaciones similares a Alemania o Corea", ha apostillado.

Así, ha instado a aprovechar esta "situación muy favorable" en España para garantizar que "no cambia". Simón ha reclamado que, durante esta fase de desescalamiento, hay que garantizar que los servicios de Atención Primaria tienen "recursos y están bien dotados" para la detección y rastreo de casos, Salud Pública puede hacer una recogida de información ante cualquier rebrote y los recursos asistenciales pueden mantener o "desplegar de la forma más rápida posible" para evitar los colapsos durante el pico de la pandemia.

El efecto de la salida de los niños

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha precisado que si hubiera habido un efecto de transmisión producido por los paseos con niños, "se hubiera empezado a observar ya" y, aunque ha señalado que ha habido "pequeñas ondulaciones" que en algún momento les ha puesto "un poco nerviosos", hasta ahora, consideran que "son las habituales en el proceso de descenso de transmisión en la pandemia".

Sin embargo, ha señalado que algunos hospitales han detectado que la edad media de los atendidos e ingresados por coronavirus COVID-19 es "menor" pero Sanidad señala que "aparentemente" no es un efecto de la salida de los niños a la calle, una medida de la que ya se han cumplido 15 días.

"En algunos hospitales, no muchos, sí que habían detectado que la edad media de las personas era menor, no niños. Esto al principio podía ser debido a varias cosas y lo primero que tuvimos que descartar es si tenía que ver con el efecto de la salida de los niños y aparentemente no lo era", ha explicado

Si bien, ha añadido que ha habido indicadores, como el descenso en la edad media de los ingresados en algunos hospitales, que han tenido que "estudiar con cuidado" y que han discutido todos los equipos de las comunidades autónomas y del Ministerio de Sanidad.

Simón lo ha achacado a que "la población está empezando a recuperar algo de movilidad y de vida social". "Algunos pacientes más jóvenes, más fuertes, que a lo mejor hasta ahora se quedaban en casa, están volviendo a ser atendidos e ingresados incluso en los hospitales, cuando los médicos lo consideran adecuado. Podría ser este efecto, pero tampoco tenemos certeza, es muy difícil de valorar", ha subrayado.

Según ha añadido, es difícil concluirlo porque "los periodos de incubación son los que son" así como "los retrasos en la detección porque las personas tardan un tiempo en ir al médico, y luego hay que hacer el diagnóstico y la notificación". Además, ha señalado que también hay que tener en cuenta los periodos de incubación que pasan de una generación de casos a otra. En cualquier caso, ha insistido en que no han observado "ningún repunte sustancial en ningún lugar".