La primavera la sangre altera: verdades y leyendas sobre las alergias al sexo

Cristina Abel 21/04/2018 09:35

Haberlas haylas, pero no como las meigas

Para empezar, no son una leyenda. Eso sí, se habla poco o nada de estas reacciones porque su incidencia es muy baja. ”Es una realidad”, dice la doctora Francisca Molero, presidenta de la Asociación de Federaciones de Sexología (FESS) y directora del Institut de Sexología de Barcelona, que subraya su poca frecuencia. “Si hablamos de la alergia al semen tenemos que especificar el tipo y el grado porque son muy variables, podemos estar ante una cierta intolerancia hasta una alergia", explica.

"En muchas ocasiones, esa reacción no es solamente al esperma, sino a los fluidos que pueden ir acompañando al semen, al líquido seminal...", añade la especialista. En estos casos, y cuando los episodios son constantes en el tiempo, no debemos dejarlo pasar por alto porque, y, tal y como advierte, "todo lo que signifique una alteración a nivel genital relacionado con una actividad sexual es un problema serio".

Un estudio de la Universidad de Cincinnati (EE UU) dio como resultado que casi un 12% de las 1300 mujeres que formaron parte de la muestra presentó síntomas similares a la alergia al semen, aunque especificaron que parte de ese rechazo tenía como origen los compuestos derivados de la alimentación y de la exposición a sustancias químicas. Las mujeres que padecen hipersensibilidad al semen (una vez descartada una infección vaginal) presentan los síntomas (picor, enrojecimiento…) a los pocos minutos del coito sin barrera o tras haber contactado con el fluido, y pueden llegar a prolongarse más de 24 horas.

Alérgenos presentes en la saliva

"Algunos de estos problemas pueden quedarse ocultos y adjudicarse a otro tipo de cuestiones, como un cambio de la flora vaginal, cuando, posiblemente, en algunos de esos casos, haya un proceso alérgico subyacente", comenta Ernesto González Mesa, especialista en Ginecología y Obstetricia y presidente-coordinador de la sección de Ginecología Psicosomática de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. "Las alergias alimentarias pueden ser transmitidas por la pareja con la que se tenga en ese momento contacto sexual a través de los fluidos, como la saliva, totalmente descrita y con una base científica muy clara", continúa el especialista.

Alergia a los besos

De ahí la alergia a los besos, que debería ser matizada, ya que no es al acto físico en sí, sino a la presencia en la boca de restos de frutos secos o de otros alimentos, trazas, aditivos, medicamentos… que contienen parte de esos alérgenos. "Está claro que incluso seis horas previas al contacto de la pareja, en la saliva puede haber restos de estos alérgenos, que son muy importantes, sobre todo los frutos secos, los restos de aditivitos y los medicamentos”, aclara González Mesa.

Síndrome post-orgásmico, POIS

El primer caso documentado de síndrome post-orgásmico (POIS) es del año 2002, pero hace apenas unos días fue publicado un estudio de la Universidad de Utrech, en el que se analizaban a un grupo de 45 holandeses diagnosticados con estos síntomas (picor de ojos y nariz, fatiga, fiebre, diarrea, dolores musculares). Pese a que en el mundo hay confirmados poco más de 50 casos, los especialistas piensan que este porcentaje podría ser mayor porque son muchos los hombres que prefieren ocultarlo o, incluso, no son conscientes de que padecen una alergia.

"Cuando se empiezan a definir este tipo de patologías existe siempre el mismo problema, no sabemos si es algo que no existe o es algo que está infradiagnosticado porque no se conoce hasta ese momento”, afirma Borja García Gómez, especialista en Urología del Hospital 12 de Octubre y miembro de la Asociación Española de Urología.

"La persona experimenta una serie de síntomas, que en el caso del síndrome post-orgásmico (POIS) son de lo más variado posible. Como profesional te hace sospechar porque cuando algo tiene esa retahíla de síntomas tan variados se pueden acusar a muchas cuestiones, agrega el miembro de la Asociación Española de Urología.

Respuesta inmunológica al plasma seminal

La reacción inmunitaria al plasma seminal, líquido encargado de mantener el medio nutritivo del espermatozoide, se describió por primera vez en 1958 y hay avalados 120 casos diagnosticados, todas mujeres. "La alergia al plasma seminal humano (HPSH) se ha descrito como una respuesta inmunológica al semen caracterizada por la elevada presencia de anticuerpos tipo IgE, IgG e IgM. Abarca una amplia variedad de manifestaciones clínicas que comprenden desde prurito local y reacciones dérmicas localizadas, generadas por el contacto de la piel con el semen, hasta situaciones de anafilaxia que ponen en riesgo la vida”, señala Natalia Urteaga, sexóloga, bioquímica y miembro de la Asociación Estatal de Profesionales de la Sexología.

"La afección es más frecuente entre los 23 y 35 años de edad y, en la mayoría de los casos, los síntomas se inician dentro de la primera hora tras el contacto con el semen o inmediatamente después de dicho contacto. El método de prevención es el preservativo, aunque no es la opción más adecuada para según qué prácticas ni para la concepción”, añade la experta.

Hipersensibilidad al látex, a lubricantes y juguetes eróticos

La alergia al látex se origina tras el contacto reiterado con algún objeto elaborado con este material. Sus síntomas son la urticaria, eczemas, rinitis, conjuntivitis e incluso asma. Tanto en hombres como en mujeres con una alta sensibilidad, la reacción será muy llamativa y rápida, con picor e inflamación genital inmediatos.

“Cada vez hay más oferta de preservativos libres de látex o de poliuterano. Nosotros en las exploraciones ya no utilizamos látex, sino guantes de nitrilo o vinilo porque nos estaban provocando reacciones cutáneas a los especialistas”, dice la doctora Molero. González Mesa recalca que, además, hay casos de hipersensibilidad a lubricantes, juguetes sexuales, espermicidas…, todos ellos elementos que forman parte de las relaciones sexuales y que, en muchas ocasiones, no se tienen en cuenta.

Fenómeno de la evitación de la respuesta

La vergüenza, la ignorancia, el miedo y que le demos poca importancia suelen ser los motivos por los que muchas personas sufren en silencio síntomas de hipersensibilidad durante y después de una relación sexual. En la mayoría de los casos, acusamos estas señales a cuestiones psicológicas, al cansancio, al estrés diario, y le damos escasa consideración, cuando las consecuencias emocionales pueden convertirse en un obstáculo para la persona y para la pareja.

“Normalmente es un problema que suele afectar a toda la respuesta sexual, desde la excitación hasta el orgasmo, tanto en uno como en otro. Acaba afectando al deseo y puede llevarnos al fenómeno de evitación de la respuesta. Cuando evitamos la exposición a lo sexual estamos evitando muchas cosas, porque en muchas ocasiones va acompañada de una evitación emocional. Es precisamente ese factor emocional de alejamiento el que produce un problema importante”, concluye Molero.